Un informe del Sistema Único de Admisión (SUA) indica que sólo el 39% de las vacantes ofrecidas por las 27 universidades que participan del Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Educación Superior (Pace) son utilizadas y que ninguno de los planteles completa los cupos disponibles.
Si se consideran, además, las dos instituciones técnicas que participan en este programa, que está destinado a asegurar el ingreso de estudiantes que no podrían optar a un cupo en la educación superior si sólo dependieran de su puntaje en la PSU, el porcentaje de cobertura llega sólo al 25% de las vacantes, pues de 7.721 cupos, solo se utilizan 1.943 (ver infografía).
Este año, 456 colegios participan en el programa y en cada establecimiento son parte del plan los estudiantes de tercero y cuarto medio. Al finalizar el Pace están habilitados para optar a un cupo directo a la educación superior quienes estén en el 15% superior de puntaje ranking de notas del colegio y cumplan con un mínimo de 85% de asistencia al programa. Ellos deben rendir la PSU e independiente del puntaje que obtengan pueden matricularse directamente en alguna de las instituciones adscritas de acuerdo a los cupos ofrecidos.
Según el informe que el SUA elaboró en julio, 18 de las 27 universidades tienen una cobertura inferior al 50% y sólo cinco de ellas completaron más del 60% de las matrículas.
De las conclusiones del estudio se desprende que, a juicio de los rectores, existen problemas de implementación. El 69% de los inconvenientes se debería, según las autoridades universitarias, a restricciones financieras. El 62%, a dificultades administrativas, y el mismo porcentaje opina que el motivo apunta a una inadecuada coordinación entre el equipo central Pace-Mineduc y cada universidad.
"Se señala el envío de información errada desde el ministerio y la no incorporación del enfoque territorial adecuado para la determinación de financiamiento y administración", afirma el estudio como comentarios adicionales.
El rector de la U. de Talca, Álvaro Rojas, explica que "el Pace es un proyecto generado en Santiago, pensado desde el centralismo". Esto, dice, genera problemas, por ejemplo, en el financiamiento del costo del transporte de los estudiantes desde las zonas rurales de las regiones para llegar a las universidades: "No se cubre la movilización ni tampoco el costo de una pensión, esto lo hemos hecho presente y no hemos podido lograr que se entienda en el ministerio", indicó Rojas.
Otro elemento, detalló el rector Rojas, es que la oferta de cupos no necesariamente se relaciona con la demanda, ya que los estudiantes eligen carreras que tienen restricciones, como por ejemplo las del área de la salud.
La directora del Sistema Único de Admisión, María Elena González, coincide con esta evaluación: "Lo que hemos visto es que las preferencias de los estudiantes tienden a concentrarse sólo en algunas áreas, las más típicas. Evidencia de lo anterior es que de las 10 carreras que concentran la mayor cantidad de postulaciones, ocho son del área de la salud como Enfermería, Medicina y Obstetricia".
La jefa de la División de Educación Superior del Mineduc, Alejandra Contreras, planteó que "es importante aclarar que el hecho de que no se llenen todas las vacantes no tiene relación con el resultado del programa, porque esta gran oferta apunta a que los jóvenes tengan más opciones donde elegir. No obstante, lo que busca el Pace es permitir que los estudiantes que concluyen exitosamente su preparación y son habilitados para acceder a cupos especiales puedan ingresar a la educación superior".
Alza en matrícula
De acuerdo a los datos entregados por el Mineduc, entre 2016 y 2017 el número de estudiantes de liceos Pace matriculados en universidades, ya sea vía cupos exclusivos o por otras formas de acceso, creció 7,4%, pasando de 6.208 matriculados a 6.670.
Según el ministerio, en 2017 fueron 2.599 los alumnos matriculados en alguna de las 29 instituciones tras completar el programa, a diferencia del 2016, donde ingresaron 479 en total. Esto equivale a que un 71% de los estudiantes ingresó a educación superior por esta vía, mientras un 23% lo hizo a través de la PSU.
El Liceo Manuel Montt, de Ñuñoa, es parte del Pace hace tres años. Su directora, María de la Paz Bruner, cuenta que el 87% de los alumnos proviene de una situación vulnerable y que gracias a este programa "las expectativas de ellos han cambiado. Antes ni siquiera pensaban en ir a la universidad. Se están preocupando de mejorar las notas, y se dieron cuenta de que ellos sí pueden ir a la universidad", declara Bruner".
La directora enfatizó que la importancia del Pace es que no sólo prepara a los estudiantes para poder acceder a la universidad, sino que también les entrega acompañamiento cuando ya están adentro para poder asegurar su permanencia y éxito.