El relator especial de Naciones Unidas sobre la Tortura, Manfred Nowak, propuso en San Pablo que Brasil reciba presos acusados de terrorismo que actualmente se encuentran en la cárcel norteamericana de Guántanamo, en Cuba.

"Si todos los países del mundo recibieran al menos un detenido, el problema se resolvería", declaró el jurista austríaco, que es coautor de un informe sobre el presidio donde hay cerca de 200 detenidos a los que Estados Unidos acusa de vínculos con la organización Al Qaeda.

El Presidente estadounidense, Barack Obama, había prometido cerrar la cárcel poco después de asumir su cargo, pero la decisión fue postergada hasta que halle dónde alojar a los presos.

"Respaldo que todos los países reciban presos de Guantánamo. Si todos los países del mundo recibieran al menos uno el problema se resolvería", señaló Nowak, que participó de un seminario en San Pablo junto al jurista brasileño Paulo Pinheiro, miembro de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

El gobierno brasileño no expresó una posición oficial sobre el tema, pero meses atrás el secretario de Derechos Humanos brasileño, Paulo Vannuchi, se manifestó a favor de acoger prisioneros de Guantánamo.