Maestros y alumnos mexicanos  marcharon por la turística Acapulco y bloquearon alcaldías en el estado  de Michoacán en el inicio de una protesta nacional al cumplirse cinco  meses de la desaparición y presumible masacre de los 43 estudiantes de  Ayotzinapa.

La manifestación en Acapulco concluyó sin incidentes reportados, pero  estuvo rodeada de tensión por los choques del martes entre policías federales y  maestros que concluyeron con un profesor jubilado muerto y más de 100 detenidos. 

La Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero  (Ceteg), a la que pertenecen los manifestantes, denunció que el maestro murió  después de ser golpeado por la policía durante el desalojo de la protesta, lo  cual es negado categóricamente por el gobierno.

Este jueves, centenares de miembros de la Ceteg, una corriente radical del  sindicato nacional de maestros, exigieron justicia por la muerte de su  compañero y volvieron a reclamar al gobierno que encuentre a los 43 estudiantes  de Ayotzinapa.

Según la investigación oficial de este crimen, que estremeció a México y la  comunidad internacional, los jóvenes fueron atacados por policías corruptos de  la ciudad de Iguala (Guerrero), quienes después los entregaron a sicarios del  narcotráfico que los asesinaron, incineraron y arrojaron los restos a un río. 

Las familias, maestros y organizaciones de apoyo rechazan esta versión,  sobre todo porque únicamente se han podido identificar los restos mortales de  uno de los estudiantes.

En la tarde de este jueves, al cumplirse cinco meses del atroz crimen, se  convocó una nueva manifestación de protesta en el centro de Ciudad de México.

A su vez, en el conflictivo Michoacán maestros de la CNTE bloquearon desde  primera hora del jueves los accesos de una veintena de ayuntamientos incluido  el de la capital estatal, Morelia, según dijo a la AFP el titular de la  Secretaría de Gobierno de Michoacán, Jaime Esparza.