A partir del 1 de septiembre próximo, el sistema de limpieza de calles en la comuna de Providencia pasará a ser mayoritariamente manual, y no mecánico, como ocurre actualmente, en que el 80% se realiza con máquinas de limpieza.

Esto, luego de que el concejo municipal aprobara este martes, por nueve votos a favor y uno en contra, la adjudicación del contrato de aseo a la empresa Dimensión por un costo mensual de $ 195 millones por los próximos seis años.

El contrato dispondrá de 116 mantenedores urbanos (trabajadores de la limpieza) y solo dos máquinas limpiadores, de mayor dimensión y más silenciosas que las usadas hasta ahora.

Con este cambio de contrato, la proporción de servicio mecánico versus el realizado manualmente se invierte, dejándolo a partir del 1 de septiembre en un 80% manual.

Según señaló la alcaldesa Evelyn Matthei, para una comuna como Providencia, que recibe una población flotante cercana a 1,8 millones de personas al día y con un alto flujo vehicular, el servicio mecanizado de limpieza de calles no era la mejor opción y el ruido molestaba a los vecinos. "Por eso optamos por un sistema más eficiente y pensado para los distintos sectores de la comuna. De esta forma, tendremos mantenedores urbanos en zonas más residenciales y un servicio mecanizado más silencioso y a menor escala en los sectores comerciales", dijo la edil.

Según la Dirección de Aseo Municipal, el contrato vigente, y que vence a fin de mes, no cumplió las expectativas prometidas basado en un modelo con pocos operarios y cinco máquinas de limpieza. "Si bien el monto sube un 6,5% respecto del proyecto anterior ($ 183 millones), ofrece más servicios que antes, y creemos que efectivamente tendrá una mejora en el servicio completo de limpieza y barrido urbano", dijo Eduardo Arancibia, director de Aseo, Ornato, Medioambiente y Mantención.

El directivo señaló que el actual contrato, al ser mecanizado, incluía solo 22 mantenedores urbanos en 2011, pero dado los resultados deficientes de las máquinas limpiadoras, tuvo que ir aumentando el número de personal, sin que se lograran los resultados comprometidos.

A esto se sumaron los reclamos de los vecinos que en los últimos seis años convivieron con el ruido, el polvo en suspensión y otras externalidades asociadas a la tecnología.

Miriam Sánchez, presidenta de la Junta de Vecinos N°6 de Santa Isabel, apoya el cambio de sistema. "Las famosas máquinas no pueden meterse en los rincones, en cambio los manuales limpian por todos lados, los estacionamientos principalmente, y las orillas de las veredas. A veces las máquinas también pasaban de noche metiendo ruido, y como operan con agua, si se termina el agua y sigue pasando la máquina se levanta mucho polvo".

Para la dirigente vecinal Eliana Pizarro, el sistema de aseo ha empeorado en el último tiempo. "Por eso, hay que ver cómo funciona, pero creo que también hay que mejorar la planificación. El jueves habrá lluvias y no se ve que se estén preparando las calles", advierte la dirigenta.