Un anuncio parecido a las cajetillas de cigarros advirtiendo sobre los peligros de la nicotina podrán tener en el futuro los videojuegos que se vendan en Chile.

La Cámara de Diputados aprobó en general un proyecto de ley que obligará a los fabricantes e importadores de estos productos a colocar un rótulo, que ocupe, al menos, el 50% de la superficie de ambas caras de los juegos, indicando si su nivel de violencia lo hace apto para todo público, mayores de 13 o exclusivamente para adultos. La iniciativa también planea que las consolas cuenten con un dispositivo de control parental, de manera de poder regular la duración y contenidos de los juegos.

Estas modificaciones deberán ser ahora analizadas en las comisiones del Parlamento antes de estar en condiciones de convertirse en ley.

El diputado Gonzalo Arenas planteó que "la infracción a estas normas será sancionada con multa de 1 a 50 UTM    ($ 1.045.000) y el decomiso de las especies materia de la infracción, por omitir la obligación de publicidad". Añadió que también habrá multas entre 50 y 250 UTM ($ 5.225.000) si las consolas no son vendidas con un mecanismo de control parental.