A las 10.30 de la mañana del lunes y bajo una lluvia intermitente se dio inicio a la prueba de carga estática sobre el puente Cau Cau de Valdivia, región de Los Ríos. La pericia encargada por el fiscal de la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte, José Morales, busca determinar el estado de los tableros del viaducto que une los sectores de Las Animas e Isla Teja, lo anterior dentro de la investigación penal que sigue el persecutor por un eventual fraude al Fisco en la construcción de la estructura.
Para realizar la prueba se utilizaron 10 camiones tolva con un peso de entre 19 y 21 toneladas, que permiten visualizar las tensiones y deformaciones del puente a través de sensores que fueron instalados en la estructura. El trabajo es desarrollado por el Dictuc de la Universidad Católica, quienes son los encargados de recopilar los datos que son contrastados con un modelo de cálculo, y también participan peritos del Laboratorio de Criminalística de la Policía de Investigaciones (PDI).
Tras la prueba, el fiscal José Morales dijo que "hoy se desarrolló la prueba de carga estática, que tiene como objetivo medir las vibraciones, deformaciones y tensiones de la estructura del puente. (...) De acuerdo con los parámetros que se han informado, el puente se ha comportado acorde a la norma y a los cálculos esperados que tenía previamente la gente del Dictuc de la Universidad Católica".
El seremi de Obras Públicas del MOP en Los Ríos, Jorge Alvial, explicó que "estamos acompañando y haciendo lo que nos corresponde, que es el control al ingreso del recinto. La fiscalía es la responsable de las pruebas y tengo entendido que hoy (ayer) son las pruebas estáticas y mañana (hoy) serían las dinámicas con movimientos de vehículos".
Por su parte, el alcalde de Valdivia, Omar Sabat, destacó que esta investigación "es un paso que se está dando y espero que se tengan buenos resultados, porque mas allá de si es un puente del tipo basculante o tradicional, lo que nos interesa como ciudad es tener conectividad en el territorio".
El abogado de Azvi, Luis Hermosilla, explicó tras la pericia que el puente "se comportó como correspondía. Resiste, a lo menos, 200 toneladas. Esto significa que si un auto pesa 2 toneladas, soporta 100 autos simultáneamente sin problemas. Si un taco cubriera completamente el puente, no caben más de 70 vehículos. Hoy podría estar abierto y podrían circular con absoluta libertad todos los valdivianos".
Independiente de los resultados de las pruebas, el MOP ha sido claro en que mantendrá la decisión de desmantelar el puente. En ese sentido, Hermosilla afirmó que tras la prueba "se elimina toda justificación que pretende imponer el ministro Undurraga de demoler el puente. No puede botar a la basura recursos de todos los chilenos. El costo de una decisión como esa es del orden de los 18.000 millones".
Sin embargo, desde el gobierno han justificado la decisión basándose en un informe encargado al consorcio conformado por la empresa chilena VMB y la norteamericana Hardesty & Hanover. En el documento de 120 páginas se recomienda cambiar el sistema de levante y ambos brazos del puente, ya que en el corto plazo podría colapsar.
Desde la Dirección de Vialidad del MOP informaron que el desmonte de los brazos comenzará cuando el Ministerio Público autorice la intervención del puente y demorará dos meses.
El proceso estará a cargo de la empresa Tecnogrúas y se realizará utilizando una grúa de gran capacidad. "No será necesario dividir ninguno de los dos tableros. La grúa tomará cada tramo basculante (tablero) y los depositará en una gabarra (embarcación), que con ayuda de remolcadores los trasladará uno a uno por vía fluvial hasta el sector destinado por la empresa para su almacenamiento en la ciudad de Valdivia", señalaron.
