En La Pintana, junto a un grupo de vecinos, el presidente del PS, Osvaldo Andrade, siguió el discurso que Michelle Bachelet realizó el miércoles en la noche, en el Centro Cívico de El Bosque, donde confirmó su repostulación a La Moneda. A 662 kilómetros de distancia, en Lautaro, el jefe del PPD, Jaime Quintana, hizo lo propio frente a la TV en compañía de su familia.
Los timoneles no fueron contemplados en la escenografía que diseñó el equipo de la ex mandataria para el lanzamiento de la carrera presidencial. Incluso, en la puesta en escena inicial, la única representación política considerada era la del alcalde PS de la comuna, Sadi Melo, excluyendo a cualquier otro dirigente político.
No obstante, rompiendo el diseño original, a última hora, el comando de la ex funcionaria de la ONU tuvo que dar luz verde a la presencia del diputado PPD Tucapel Jiménez -que representa a la zona en el Parlamento y cuya exclusión fue reclamada por el PPD- y del hijo del edil, Daniel Melo, quien es vicepresidente del PS y busca arrebatarle el cupo al actual diputado de la zona.
El excesivo recelo del comando de Bachelet y la nula referencia a las colectividades que la apoyan en su discurso del miércoles -la ex presidenta pidió "una nueva mayoría social y política", sin mencionar a la Concertación- reactivó las críticas al interior de los partidos y reinstaló la tensión en la oposición.
"Ningún candidato a presidente podrá prescindir de los partidos políticos, porque son la base de la sustentabilidad política de cualquier gobierno", dijo el jefe de la DC, Ignacio Walker.
El análisis del senador de la falange fue compartido, con matices, por los timoneles del PS y PPD, que respaldan la repostulación de Bachelet.
El presidente del PPD, Jaime Quintana, si bien señaló que la candidatura de la ex funcionaria de la ONU "va más allá de los partidos", advirtió que "eso no significa que las dos colectividades no hagan lo que saben hacer, que es acumular votos y trabajar por el triunfo de su opción".
En la misma línea, el líder del socialismo señaló que si bien el diseño de "bienvenida" de la ex presidenta tenía un marcado sello ciudadano, ello no implicaba una ausencia de los partidos en la campaña de Bachelet. "Queremos desmentir que los partidos estamos escondidos, al menos no es el caso del nuestro. Los partidos son instrumentos para lograr objetivos políticos, y nuestro objetivo es que Bachelet sea Presidenta de Chile", afirmó.
Es en ese escenario que ayer desde las cúpulas del PS y el PPD reconocieron que fue el entorno de Bachelet el que mantuvo el control del plan para el desembarco, y que sólo desde el fin de semana los timoneles estaban informados del diseño acordado con la ex jefa de ONU Mujeres.
Es ese mismo entorno desde donde se defiende la autonomía que la ex mandataria quiere tener de las tiendas, en el entendido que el desprestigio de éstas constituye una traba para su repostulación.
AGENDA DE BACHELET
La entrega de un enorme ramo de flores para la ex presidenta fue uno de los pocos movimientos que se registraron ayer en la Fundación Dialoga.
Desde el edificio de Bilbao ya han sido trasladadas las pertenencias de varios de los integrantes del círculo cercano, que se instalarán ahora en las dependencias de lo que será el comando de Bachelet.
Allí se trabaja en la agenda de la ex jefa de Estado para los próximos días, y que tal como ha sido la característica en los últimos meses, se ha manejado en completo hermetismo.
Fuentes al interior de los partidos aseguran que el lunes la ex mandataria sostendrá una nueva actividad pública de carácter ciudadano.
Además, confirman que Bachelet se reunirá con los jefes de partidos y se afinarán los detalles de la proclamación conjunta del PS y el PPD, el próximo sábado 13 de abril.
