En las últimas semanas, el diputado socialista Marcelo Schilling inició contactos con su par del PPD Pepe Auth. El legislador PS fue mandatado por la mesa que encabeza Osvaldo Andrade, para liderar las tratativas y llevar adelante un viejo anhelo entre los dirigentes del bloque progresista: el partido federado.

La idea va en línea con la intención de ambas tiendas, que tras el triunfo de Michelle Bachelet en la segunda vuelta presidencial buscan converger políticamente en una serie de espacios y fortalecer así el sector progresista.

Ejemplo de ello es la iniciativa surgida en los últimos días para fusionar los comités de diputados en la Cámara, lo que transformaría a ese grupo en la primera fuerza de la Nueva Mayoría.

Esto, a pesar de los reparos manifestados por dirigentes democratacristianos, quienes acusan cierta intención de "aislar" a la falange y disminuir su influencia al interior del bloque que sustentará el próximo gobierno.

De hecho, la fusión de los comités ha sido interpretada por la falange como una maniobra en represalia a la unión DC-PR acordada en el Parlamento.

A lo anterior se suma la posición adoptada por varios dirigentes del PPD en los últimos días. La semana pasada, en una entrevista en La Tercera, el senador electo Felipe Harboe dijo que "si la DC fue hegemónica en los noventa, hoy el PPD y el PS tienen un mayor auge".

A las palabras del ex subsecretario de Interior se sumaron los dichos de la alcaldesa Carolina Tohá, que en entrevista a Qué Pasa afirmó que la conformación del eje histórico PS-DC al interior de la Concertación fue "tóxica" (ver nota secundaria).

MESA CONJUNTA

En una primera etapa, la iniciativa para concordar un partido federado promueve una coordinación que incluya una mesa conjunta que encabece el proyecto. 

"Está en evaluación la idea de una convergencia política mayor, como un partido federado, donde los partidos mantengan su identidad, mantengan sus declaraciones de principios, sus dinámicas internas, pero que exista una directiva de partido federado en el que se puedan revisar algunas materias", explicó Schilling, uno de los artífices de la iniciativa.

Entre las materias de las cuales se ocuparía el partido federado está la proclamación de los candidatos a las elecciones parlamentarias y municipales y el manejo de las relaciones con fuerzas del exterior.

De hecho, está en carpeta la elaboración de una agenda internacional conjunta, debido a que ambas tiendas comparten espacios comunes, como por ejemplo, la Internacional Socialista, organización mundial que agrupa a partidos que tienen definición socialista, socialdemócrata o laborista.

"Es una discusión que en el mundo progresista nunca salió del mundo académico. Los centros de estudios lo han discutido, pero por mucho tiempo las directivas de ambos partidos no profundizaron esa idea. En el plano político esta idea puede reabrirse", explicó Jaime Quintana, presidente del PPD.

Fuentes de ambos partidos explicaron que en enero los dirigentes encargados de las conversaciones pretenden acelerar las tratativas e incluso, no descartan que se realice un encuentro entre las dos directivas para sellar un primer acuerdo.

EL SUEÑO DE LAGOS

Desde el interior del bloque progresista creen que, tras el triunfo de Michelle Bachelet, se abren las condiciones para que la idea de un partido único entre las fuerzas progresistas de la Concertación, planteada en varias ocasiones por el ex Presidente Ricardo Lagos -la última de ellas en 2012-, se vuelva una realidad.

Al avance del bloque en ambas cámaras, se suma que a diferencia de años anteriores, entre las facciones socialistas existe una mayor propensión a mantener una agenda cargada hacia la izquierda, en contraparte al eje histórico conformado por el PS y la DC.