En Pumas ya están tranquilos. Sólo faltaba Nicolás Castillo, a quien esperaban la semana pasada para completar el plantel. El retraso había inquietado a los dirigentes, pero el jugador ya llegó México.

Sergio Egea, vicepresidente deportivo de Pumas, fue el encargado de recibir al delantero en el aeropuerto y de darle oficialmente la bienvenida.

Castillo estuvo de vacaciones en Cancún, pero después regresó a Chile en vez de sumarse a su nuevo club y los rumores que comenzaron a circular asegurando que el jugador no terminaba de estar conforme con su nuevo destino, sembraron la impaciencia en tierras aztecas. Pero todas las suspicacias generadas quedaron descartadas ayer, con el arribo del renquino a suelo mexicano.

"Es una liga mejor que la chilena. Hay muchos seleccionados de distintos países", dijo el atacante respecto del torneo mexicano a los medios que lo esperaban en el aeropuerto.

"La confianza que me dio el entrenador cuando hablé con él me convenció de venir. Quiero ser campeón también aquí y aportaré mi granito de arena para lograrlo", agregó, a propósito de sus objetivos en su nuevo club.

En tanto, junto a Castillo, arribó también Nicolás Maturana. El ex Universidad de Chile se sumó al Necaxa donde, ayer, ya le presentaron a todos sus nuevos compañeros de equipo.