El presidente de Rusia, Vladímir Putin, aseguró que su país no va a "interferir" en la situación política en Ucrania y criticó que haya "intermediarios" que sí lo hacen. 

"Estoy seguro que el pueblo ucraniano lo va a resolver por sí mismo y Rusia no va a interferir", dijo Putin en una rueda de prensa al término de la cumbre bilateral con la Unión Europea celebrada hoy, en la que el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, dijo que la UE continuará con sus esfuerzos de mediación entre el Gobierno ucraniano y la oposición.

"No creo que Ucrania necesite intermediarios. Cuanto más intermediarios hay, más problemas hay", comentó Putin.

Las manifestaciones en Ucrania comenzaron a protestar en noviembre pasado, cuando el Gobierno del presidente Víktor Yanukóvich rechazó en el último minuto firmar un acuerdo comercial con la UE y optó por aceptar de Moscú un préstamo sin condiciones de 15.000 millones de dólares y una rebaja en los precios del gas importado de Rusia.

Van Rompuy insistió en que el uso de la fuerza en Ucrania no va a resolver sus problemas políticos y recordó que esta noche viajará a Kiev la jefa de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton, como lo ha hecho ya el comisario europeo de Vecindad, Stefan Füle, para "evitar la escalada" de violencia y contribuir a "restaurar la estabilidad política".

Ante las "diferentes interpretaciones y malentendidos" que pueden tener sobre la Asociación Oriental impulsada por el bloque europeo para estrechar su relación con Ucrania, Armenia, Georgia, Bielorrusia, Moldavia y Azerbaiyán, Van Rompuy anunció que la UE y Rusia van a poner en marcha un grupo de expertos que analice esas preocupaciones.

"He dejado claro que la Asociación Oriental no afecta a los vínculos económicos, comerciales, sociales, humanos y culturales de Rusia con muchos de nuestros vecinos comunes", indicó Van Rompuy, quien aseguró que esos lazos "no estarán en peligro, sino al contrario, serán estimulados por un desarrollo económico dinámico y exitoso" de esos países.

Igualmente, dejó claro que cualquier acuerdo comercial entre la UE y esos países "es completamente compatible con los acuerdos comerciales existentes" entre Rusia y esos países, y que pueden "interactuar constructivamente con la Unión Aduanera (liderada por Rusia) mientras se apliquen las normas de la Organización Mundial del Comercio y se garantice la libertad de decisión".

Por su parte, el presidente ruso hizo hincapié en que "es en nuestro interés" que los vecinos comunes de Rusia y la UE sean "prósperos" y estén "desarrollados".

"Estos países han intentado activamente cooperar con la UE y también preservar sus lazos históricos con Rusia, y nosotros ciertamente deberíamos ayudarlos en esas aspiraciones", comentó.

Según dijo, Rusia "siempre ha respetado, está respetando y respetará los derechos soberanos de todas los entes internacionales", incluidos "los Estados nuevos que emergieron tras la caída de la Unión Soviética".

Sobre el acuerdo comercial que Ucrania no llegó a firmar con la UE, afirmó que "la preocupación aquí no es la decisión soberana de Ucrania sino el impacto económico del acuerdo".

"Cualquier decisión en términos de costes-beneficios para cualquier país la debería hacer la nación en cuestión a través de procedimientos democráticos", concluyó.