El futuro ya está aquí. Sí, 2015 es el año que Marty McFly visita en Volver al Futuro II. A pesar que solo una pequeña fracción de la historia está en realidad ambientada en 2015 -que estaba a 30 años de distancia de 1985, año en que transcurre la historia-, abundan las predicciones tecnológicas sobre lo que sería la vida de hoy. Muchas de las cuales (más o menos) se hicieron realidad.
Pero hay dos grandes avances que los cineastas no pudieron predecir: el Internet móvil y la cultura a la carta personalizada que se gestó a su alrededor. Como resultado, la versión de 2015 de Volver al Futuro II siempre parecerá anclada en el pasado.
No hay teléfonos celulares en la película. En cambio, hay muchas cabinas telefónicas con asientos. Y no parecen tener internet, al menos como la conocemos. Incluso, un servicio actual, como reportes de tráfico en tiempo real, se ofrecen en una pantalla digital de gran tamaño en una plaza, en lugar de enviar la información a dispositivos individuales como nos gusta hoy.
Del mismo modo, aunque los niños McFly están usando lentes JVC que son un buen sustituto de los Google Glass, los dispositivos están conectados a una línea telefónica compartida familiar ("Papá, es para ti", se queja la hija adolescente de Marty cuando suena el teléfono y ella se pone sus lentes para ver quién llama.) Tampoco vemos a los chicos McFly llevando estas cosas en el mundo, lo que significa que no son realmente dispositivos móviles. (Doc Brown, sin embargo, lleva sus lentes futuristas mientras está fuera de casa.)
Hay muchos fax en áreas donde hoy se usa el correo electrónico. En lugar de antiguos buzones de correo, hay equipos de fax que prometen un servicio en 0,05 segundos.
ACIERTOS
Pero hay mucho en la película que se asemeja a la realidad actual. Ahí está el reloj inteligente que usa Doc Brown para comprobar el tiempo, una referencia a los videojuegos de manos libres, la televisión de pantalla plana en casa de los McFly, todo lo que hoy existe (y que se conecta a Wi Fi). Es notable que el 2015 de Volver al Futuro cuenta con tecnología de reconocimiento facial que se ve tal como se usa hoy. Y que las empresas de prensa desplieguen aviones no tripulados para captar las últimas noticias.
El chico malo de Griff Tannen está en una banda llamada los Bionic Overlords, y de acuerdo con Doc Brown, Griff se hizo sus propios implantes biónicos.
Algunos otros detalles parecen familiares. Los voluntarios que solicitan donaciones para reparar los dispositivos de la torre del reloj aceptan pagos digitales.
El Cafe Los 80 ha automatizado el servicio de camareros, que han existido, al menos de forma experimental, ya hace unos años. También es conocido en 2015 el escaneo de huellas digitales para las cerraduras de las puertas y los cordones que se abrochan solos. Nike patentó las zapatillas de luz con un "sistema de fijación automática" hace varios años.
FUTURO REAL
Mirando viejas películas que hablan sobre el futuro, la gente tiende a fijarse en lo que los cineastas hicieron bien o mal. Pero el examen de lo avanzado del mundo real en este momento es mucho más revelador. Así que no podemos cocinar una pizza en 20 segundos con el hidratador (todavía ficticio) Black & Decker. Patinetas voladoras todavía no han sustituido a los skates con ruedas. Pero la vida en el futuro real es extraordinaria. La gente lleva pequeños computadores en sus bolsillos traseros. Cualquiera puede publicar a una audiencia global desde cualquier lugar con sólo pulsar un botón. Los científicos pueden trabajar las partes del cuerpo con impresiones en 3D. Los humanos son capaces de compartir y acceder a vastos conocimientos, como la literatura y el arte, sin salir de sus casas. Los autos no pueden volar, pero se pueden conducir solos. Teniendo en cuenta lo que podemos hacer con la tecnología actual, el 2015 de Volver al Futuro II parece francamente desactualizado.
Nos muestra personas que permanecen inmóviles en skates y autos voladores. Eso es fantástico, por supuesto, pero también representan el clásico prototipo futurista del siglo 20. Hoy en día, se espera mucho más de lo que se avecina. Dentro de 30 años, la gente anticipa el surgimiento de la inteligencia artificial, la superposición total de los mundos físico y digital, viajar a Marte, drones en todas partes, y los computadores cuánticos con velocidades de procesamiento más rápido que cualquier cosa imaginable hoy.
Ya estamos viviendo en un mundo futurista que supera con creces las promesas tecnológicas realizadas en 1989, el que en realidad no llegó en el momento en que Marty McFly viajó al miércoles 21 de octubre de 2015.