La Región de Coquimbo posee la mayor cantidad de soluciones habitacionales sin terminar, con 1.437 obras. Están en ejecución 1.331 y se han terminado 5.170 en diversos puntos.
Grecia Silva, vecina del sector de Baquedano, en Coquimbo, la ciudad más afectada por el sismo ocurrido en 2015, indica que "además del impacto sicológico que sufrimos, no tenemos soluciones en cuanto a infraestructura". La vecina añadió que "somos miles de personas las afectadas y vemos que, por ejemplo, no han hecho los muros de contención, sino que han comenzado a entregar algunas viviendas. Creemos que esto puede traer consecuencias".
Añade que un grupo de vecinos aún está esperando que les entreguen los subsidios, lo que lleva a que deban vivir de allegados, lo que genera incomodidad.
Otra dirigenta del sector, Marcia Berdeguer, quien vive en el borde costero de Coquimbo, dice que en sector están en proceso de demolición de las propiedades afectadas, pero que este trabajo hace peligrar las obras. Por ello, pide que aunque se demoren un poco más los trabajos no afecten los hogares que aún están en buen estado.
Ángelo Montaño, director del Serviu de la IV Región, responde que hasta ahora se contabiliza un avance del 85% del proceso de reposición de viviendas. "Nuestra meta es llegar a marzo con todo terminado", sostiene. Por otra parte, admite que levantar proyectos ha sido más complejo en Monte Patria y Río Hurtado, del Valle del Limarí, pues sostiene que hay sectores de riesgo para construir, lo que lleva a que demore más en concretarse la solución, pues se deben hacer estudios.