Tras el ataque ocurrido la madrugada del sábado en una empresa de transportes de Temuco, Región de La Araucanía, que terminó con 18 camiones quemados, los esfuerzos del Ministerio Público y Carabineros se centraron en recopilar la mayor cantidad de evidencias y antecedentes para identificar y detener a los autores de este hecho catalogado de "terrorista" por el gobierno.

"Las cámaras de seguridad están siendo revisadas y analizadas (...). Estamos haciendo los análisis correspondientes, que van a identificar qué compuestos se utilizaron (para quemar los camiones) y buscaremos en el entorno dónde pudieran haber sido vendidos o sustraídos", sostuvo el comandante Carlos Ramírez, jefe del Labocar de Temuco.

Uno de los elementos en discusión son las medidas de seguridad con las que contaba la empresa de Ramón Aranzasti, ubicada en un predio de una hectárea y media, a la orilla de la Ruta 5 Sur y distante 10 km de Temuco. En el recinto había estacionados 30 vehículos de carga y sólo un guardia que trabajaba como rondín del perímetro externo, y que no advirtió el ingreso de los cerca de 15 encapuchados. Según los primeros antecedentes, los sujetos habrían usado una puerta colindante habilitada para el tránsito de vecinos.

Justamente, las primeras diligencias para aclarar el atentado apuntan al círculo cercano del transportista Ramón Aranzasti, dueño de los ve- hículos afectados, y que incluye a sus trabajadores y propietarios de predios colindantes.

"Hasta el momento no tenemos ninguna señal de fuerza. Hay una observación del lugar, organización entre ellos, hay una estructura", agregó Ramírez, jefe de Labocar.

A través de un comunicado, la Corporación Chilena de la Madera (Corma) repudió el ataque. "Una vez más hacemos un llamado al gobierno a tomar medidas distintas y de mayor efectividad frente a estas graves alteraciones al estado de derecho y a la seguridad de los chilenos".

Inicia juicio Luchsinger

Este lunes, a las 9.00, en la primera sala del Tribunal de Juicio Oral de Temuco, se iniciará el juicio contra los 11 acusados por la muerte del matrimonio compuesto por Werner Luchsinger y Vivian Mackay, ocurrido el 4 de enero de 2013.

El proceso judicial se inicia bajo un ambiente de tensión tras el atentado ocurrido el fin de semana. Por esta razón, las autoridades locales, las policías y miembros del Poder Judicial coordinaron medidas de seguridad especiales para el tribunal.

"Hay una planificación estratégica y táctica para enfrentar esta situación. El lugar va a quedar aislado para el estacionamiento de vehículos en el perímetro y los peatones van a tener el normal desplazamiento para no provocar ningún trastorno", dijo el jefe de la IX Zona de Carabineros, Christián Franzani.

El fiscal regional de La Araucanía, Cristián Paredes, sostuvo que para este juicio "se desarrollaron un sinnúmero de diligencias, contamos con medios de prueba, que se corresponden entre sí y que creemos son contundentes para lograr la convicción del tribunal".