A 300 metros de altura la torre Costanera, ubicada en la comuna de Providencia se erige como el principal símbolo de modernidad, productividad y desarrollo del país. Abajo, en plena vía pública, una corriente de agua, proveniente del río Mapocho, hizo colapsar gran parte del centro financiero de esta comuna, anegó el mall más grande de Latinoamérica, obligó a cerrar parte de la autopista Costanera Norte, y generó estragos en edificios y comercio emplazados en plena Avenida Providencia.

Son consecuencias del anunciado evento meteorológico pronosticado para el pasado fin de semana, y que hizo revivir las imágenes del último desborde del Mapocho, ocurrido en 1982, después de tres días de fuerte temporal. La diferencia con el pasado, es que ahora las autoridades aseguran que se tomaron las medidas para evitar una emergencia como la de ayer.

Entonces, ¿qué pasó? ¿Por qué no se evitó el desborde? El intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, apuntó la responsabilidad a la empresa concesionaria Costanera Norte, que tiene a cargo las obras del Plan Santiago Centro Oriente, que busca mejorar la conectividad vial en una de las zonas más congestionadas de la capital. Son precisamente las faenas de una parte de este proyecto las que fueron cuestionadas por Orrego, a la hora de buscar culpables por las inundaciones.

“Se advirtió a la empresa. El jueves de la semana pasada estuve en terreno diciéndoles que había una posibilidad de desborde producto de la lluvia. Todos sabemos que el Mapocho es un cauce sensible, que crece en el invierno y, sin embargo, tuvimos una inundación que, paradójicamente no fue arriba. El río no se desbordó por arriba, como el año ‘82, se desbordó por abajo, porque las labores de emergencia y prevención que hizo la empresa fueron malas. Aquí hay una responsabilidad concreta de Costanera Norte”, señaló el intendente.

Las críticas contra la concesionaria siguieron luego que los ministros del Interior y Obras Públicas realizaran un sobrevuelo por la zona afectada. El titular del Interior, Jorge Burgos, dijo que “desde el aire se puede apreciar la situación más crítica. Qué duda cabe que lo ocurrido no es por efectos de la naturaleza, sino que por efectos de la imprevisión de la empresa que está realizando los trabajos”.

Alberto Undurraga, ministro de OO.PP. aseguró que las responsabilidades de la empresa “tiene que manifestarse en pagar cada uno de los daños que se han producido aguas abajo”. En esa línea, la Autoridad aseguró que le exigieron a la empresa habilitar una línea 800 y un link en su página web para que los afectados puedan contactarse con ellos.

Las acusaciones se basan en que una parte de las faenas, específicamente las que se realizan en el lecho del río frente al Parque Bicentenario, en Vitacura, necesitaron la construcción de un dique para encauzar las aguas y dar espacio seco para realizar movimientos de tierra (ver infografía). Un trabajo que, según el gerente general de Costanera Norte, Diego Savino, es parte del protocolo de acuerdo de obras que se hizo con el MOP.

Fiscalización

Ante la emergencia anunciada durante esta semana, Savino aseguró que había un plan de contingencia y “estaban las autorizaciones para hacer los trabajos (...) El agua superó el caudal de desvío que era de 80 metros cúbicos por segundo, pasó a ser de 120 metros cúbicos por segundo, se desbordó e ingresó en uno de los túneles que está en construcción. Eso hizo como sifón y desbordó hacia Costanera Sur y Costanera Norte”.

El gerente de la empresa no quiso polemizar con la autoridad, y aseguró que “tenemos que pensar en contener la emergencia, después se verán las responsabilidades”.

Un tema no menor porque el ministro Undurraga también anunció un “sumario interno, y de esa forma poder determinar las responsabilidades públicas”, al interior de la cartera. Según trascendió, el inspector fiscal del MOP a cargo de dicho proyecto, Enzo Estrada, está internado en un centro asistencial por problemas de salud, y la fiscalización debiera quedar en manos de autoridades de la Coordinación de Concesiones de esta cartera.

Para el ex subsecretario de OO.PP. Lucas Palacios, también hay responsabilidad en “la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH, del Ministerio) que es la que debe velar por la fiscalización de las obras que tienen que ver con los cauces de los ríos. El problema es que, conociéndose que venía un frente, no hubo los resguardos ni coordinación entre autoridad y empresa, para mitigar la emergencia que hemos visto”.

El experto en emergencias Michel de L’Herbe, añade “sin duda hubo un problema de la empresa en cuanto a la planificación ante un evento hidrometeorológico anunciado hace días, y también del Estado que debe verificar que las obras realizadas sean las adecuadas”.