Los cerros de Valparaíso celebran una fiesta de 15 años. No se trata del festejo de un adolescente, sino que la conocida competencia de descenso urbano Valparaíso Cerro Abajo. El evento se llevará a cabo mañana a partir de las 11 horas, promete un circuito mejor que el anterior y mostrar la historia de la ciudad puerto.

Son 1,8 kilómetros de recorrido desde el inicio hasta la meta, junto a obstáculos, curvas cerradas, escaleras y ramplas que los ciclistas deben sortear.

La carrera consiste en un trayecto en el que cada competidor tendrá la oportunidad de hacer su mejor marca. Quien llegue abajo en el tiempo más rápido gritará campeón.

Víctor Eresmann es uno de los creadores del llamativo evento y comenta cómo han sido estos años desde que se creó la competencia. La idea inicial se remonta al 2002, cuando la revista "Contrapedal" buscaba posicionarse y hacerse conocida en el medio del ciclismo.

"Lo que hicimos fue llevar a cabo una idea vox populi. Para todo el que practica este deporte, bajar por los cerros de Valparaíso, era algo obvio que había que intentar", explica Eresmann.

"La respuesta fue importante. Después del primer evento nos dimos cuenta de que había mucho potencial", agrega.

El chileno Antonio Leiva (2004, 2005, 2006 y 2008) y el eslovaco Filip Polc (2010, 2011, 2014 y 2015) son quienes más veces han logrado quedarse con la copa de la exigente carrera de la ciudad patrimonio de la humanidad.

El último campeón fue el alemán Johannes Fischbach. Sin embargo, Valparaíso, su gente y la historia pueden decir que el primero fue un chileno.

Así lo recuerda Sebastián Vásquez, el ciclista nacional que ganó la primera edición. "Es la carrera más extrema de Sudamérica y probablemente del mundo. La he corrido muchas veces. Recuerdo que tenía muchos saltos y obstáculos. Era bien distinto a lo que es ahora. Sin duda que es una experiencia increíble y que no se compara con ningún otro evento de la categoría. Durante varios años participé de muchos descensos urbanos en Chile y fuera del país, pero ninguno se acerca a la atmósfera que genera el Valparaíso Cerro Abajo", asegura.

¿Qué es lo que distingue esta competencia del resto? Una de las características que lo diferencia de otras es que "acá hay público", explica Eresmann.

"Además la extensión es más o menos un minuto más larga que el resto de las carreras", agrega.

Sin embargo, adelanta que para éste año la versión tiene algunos cambios. "Queremos un trayecto igual de espectacular que las otras versiones, pero más fluido para alcanzar mayor velocidad. La partida es desde un dormitorio, después pasamos por dos patios, un techo y una casa entera", revela el creador del circuito.