El arquero de la Universidad de Chile, Johnny Herrera, prefirió optar por una pena con beneficios al aceptar responsabilidad en los delitos acusados, y acceder a un juicio abreviado ante el Juzgado de Garantía de Quintero.
Herrera, fue condenado por el delito de conducción en estado de ebriedad, luego que fuera sorprendido manejando desde una fiesta en Maitencillo con 0,8 gramos de alcohol por litro de sangre, durante fiestas patrias de 2012.
El Fiscal de Quintero, Mauricio Dünner, presentó la acusación en contra del futbolista y solicitó una pena de dos años de presidio, la suspensión de la licencia de conducir por el mismo plazo y el pago de una multa de 10 UTMs.
Sin embargo, al aceptar responsabilidad en un juicio abreviado, Herrera fue condenado a una pena inferior, de 150 días de presidio menor. lo que se cumplirá firmando mensualmente ante Gendarmería.
El abogado defensor de Herrera, Felipe Barruel explicó en CNN Chile, que el futbolista "nunca tuvo arraigo nacional ni por esta causa ni por ninguna otra, puede ejercer sus labores" por lo que si es nominado a la selección chilena, "no es impedimento".
Barruel aclaró además que Herrera sólo fue condenado por conducir en estado de ebriedad, y el uso de una licencia duplicada fue descartado, porque "el delito no tenía sustento legal".
Debido a este nuevo delito cometido por Herrera, la justicia revocó la suspensión condicional de la causa, en que el imputado fue acusado de atropellar a la joven Macarena Casassús, de 22 años, mientras conducía ebrio, en diciembre del 2009, delito por el que fue condenado en junio pasado a cumplir 41 días de pena remitida y a la suspensión de su licencia de conducir por dos años.
