Si algo se le alabó a la Universidad Católica bicampeona del fútbol chileno fue el buen desempeño de los tres refuerzos que llegaron al club a mitad de 2016. Pocos pueden discutir que Diego Buonanotte y Enzo Kalinski brillaron con luces propias. También Ricardo Noir. En ese sentido, cuerpo técnico y directorio evaluaron muy bien a los tres.
A sabiendas de aquella ponderación, Cruzados comenzó de inmediato el trabajo de renovación de los tres futbolistas. Esto, claro, sumado al petitorio de Mario Salas, para quien el trío argentino es fundamental en el armado del equipo. La prioridad es mantenerlos a todos, ojalá por un buen tiempo, en San Carlos de Apoquindo. Así, el primero en llegar a acuerdo fue Buonanotte. Pero de ahí para adelante las cosas se complicaron.
Porque aunque hace un tiempo en el club universitario daban prácticamente por sentadas las renovaciones, tanto las conversaciones con Kalinski como con Noir se han estancado. Y mientras en el entorno del primero aseveran que las negociaciones "avanzan", el caso que se puso cuesta arriba es el de Tito, quien termina su préstamo en la precordillera a mitad de 2017.
Racing de Avellaneda, club dueño de su pase, no quiere darle en el gusto a la UC, que desde un tiempo hasta esta parte ha hecho de la austeridad una política a la hora de buscar fichajes. Los cruzados optan por gastar poco en préstamos, por sobre invertir en la compra de pases. Y ahí es donde sus intenciones chocan con las de la Academia.
"A nosotros no nos interesa un nuevo préstamo. La idea es que lo compren (la UC), que vuelva a Argentina, o que lo compren de otro lado", asevera tajante para La Tercera Alfredo Chiodini, vicepresidente de la Academia. Eso, claro, viene a darle un golpe duro a la Católica, puesto que la opción de compra con que llegó Noir a la tienda cruzada asciende a 1,5 millones de dólares, una cifra inalcanzable para el club.
Porque los de la franja sólo pagaron US$ 110.000 por el préstamo de Tito y con su política de contrataciones, proyectar que gastarán 13 veces más que hace algunos meses es irrisorio, considerando además que se trata de un jugador de 30 años. Una futura venta para recuperar ese dinero es muy difícil.
En ese sentido, Luis Belvedere, representante del extremo, trabaja a toda máquina para intentar volcar la el pensamiento del elenco transandino, aunque en su entorno aseguran que por ahora el tema está "stand by" y que entienden que será muy difícil revertir el deseo del cuadro argentino.
Consultados por la situación, en el elenco de Las Condes prefirieron guardar silencio, al menos de forma oficial. "No comentamos nuestras negociaciones, sólo comunicamos cuando las situaciones están resueltas para bien o para mal", aseveran. En el directorio, eso sí, saben que la pista viene dura. "No podría asegurar que llegue a buen puerto. Racing sólo quiere vender, aunque quizás podríamos negociar que sea más barato", comentan en la cúpula estudiantil.
¿Y Noir? "Se quiere quedar en Chile. Está feliz en el país y más aún en la UC", aseveran cercanos al futbolista. "Tendrán los clubes que ver qué pasará, sino, volveré a Racing", expuso ayer el jugador. La palabra es de la Academia.