Radiografía de un páramo
Si bien Daniela Seguel está entre las 200 mejores del mundo y tiene mejor ranking que el número uno chileno masculino, apenas hay seis jugadoras con ranking WTA. Las principales exponentes del tenis femenino coinciden en que la falta de difusión y de figuras atenta contra un mayor desarrollo de la actividad en el país.
El tenis femenino chileno vive una extraña realidad. Por un lado, apenas seis jugadoras tienen ranking profesional y, por el otro, la número uno de Chile, Daniela Seguel, tiene mejor ubicación (192ª) que su equivalente másculino (Gonzalo Lama, 219º) en la clasificación de la ATP, según el listado de la última semana.
Con una carrera a pulso y mínimos recursos, la Pantera apostó por fijar su centro de operaciones en Chile y trasladarse a Europa para disputar certámenes ITF de mayor cuantía, lo que le permitió ingresar al cuadro principal del WTA Bogotá y jugar las clasificaciones del US Open. El tiempo le dio la razón, pues a sus 23 años hoy está en el mejor momento de su carrera.
"Yo creo que mi clave ha estado en la perseverancia y el trabajo duro. Después del primer semestre del año pasado, que fue duro y difícil para mí, pensando en el retiro, volví para dedicarme en Chile y comenzar todo de nuevo. Así, tuve una segunda parte muy buena y este año ha sido más de consolidación, acostumbrándome a jugar torneos challengers hacia arriba, donde he ido encontrando una regularidad que hoy me tiene en mi mejor ranking. Creo que por ahí pasa el buen momento; en seguir, a pesar de todo, con la tranquilidad de que las cosas llegarían", señala.
También nacida en 1992 es Fernanda Brito, 24 años (nació en febrero, Daniela en diciembre), quien esta temporada privilegió en su calendario los torneos ITF de US$ 10 mil, con buenos resultados que le han permitido volver a insertarse entre las 400 mejores del mundo (384ª) y aspirar a más. "Ha sido un buen año. Obviamente que uno piensa que siempre puede ser mejor, pero en lo personal estoy mucho más madura y estoy tomándome cada vez mejor este trabajo. Quiero poder jugar torneos más grandes y cada año ir compitiendo más", destaca.
El podio nacional lo completa Andrea Koch (31 años y 800ª), quien ha tenido poca actividad esta temporada. Las restantes jugadoras en el escalafón son Bárbara Gatica (20 y 928ª), Ivania Martinich (21 y 950ª) y Daniela López (19 y 1.251ª), quienes están haciendo sus primeras armas en el profesionalismo. La chilena-estadounidense Alexa Guarachi (25), quien llegó a ser número dos del país en la temporada pasada, recién hace unos días volvió a la actividad tras casi un año sin jugar producto de una rotura de ligamentos en la rodilla derecha. Esta prolongada ausencia la hizo desaparecer de la clasificación. Más atrás aparecen las juveniles Fernanda Labraña (17 y 108ª ITF) y Jimal Gerald (14 y 415ª ITF), quienes surgen como las grandes cartas del recambio.
Fernanda Brito tiene un diagnóstico claro sobre las razones que impiden que haya más jugadoras en el circuito: "Creo que en general el tenis sudamericano está muy abajo. En todos los países cada vez hay menos plata, por lo tanto hay menos chicas. Ahora están todas tomando la oportunidad de irse a Estados Unidos, lo que me parece muy bien. Pero en el tenis chileno, por suerte nosotras, las más grandes, contamos con la plata del Comité Olímpico para poder viajar".
"Digamos que en sí el tenis femenino pasa por una crisis. También por lo poco que se difunde y porque lamentablemente todavía no hemos tenido una tenista top con quien las más chicas se puedan motivar, a excepción de Anita Lizana en otros tiempos. Por eso, es una de mis motivaciones ser reconocida y a lo mejor ser esa tenista que permita que el tenis se vuelva a masificar y ser un ejemplo para las demás", sentencia Seguel.
Mientras que Koch coincide en que la difusión es escasa y detalla sus emprendimientos en esta área, donde persigue atraer a nuevas figuras. "El tenis femenino siempre ha sido discriminado y por eso lancé un circuito de torneos, que busca que haya mayor difusión. La única forma de llegar a los medios es creando este circuito, porque es triste que en el fondo nadie nos ayude y por lo mismo me junté con Mabel (Berríos) y reuní a varias jugadores, porque si la montaña no viene a nosotras, nosotras iremos a la montaña", comenta.
Actualmente, los únicos dos eventos profesionales que se realizan en Chile son los que organiza hace varios años -y con encomiable esfuerzo- la ex tenista Macarena Miranda: un ITF US$ 10 mil y otro de US$ 25 mil, que este año se disputarán en el Club de Tenis El Alba y en el Club Providencia, respectivamente, donde las jugadoras nacionales, como Alexa Guarachi y otras que necesiten sumar para el ranking, tendrán una valiosa oportunidad para comenzar a dar un salto que les permita llevar al tenis femenino a lo más alto.
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