El 12 de enero a las 11:10 horas, la fiscal Tania Sironvalle tomó declaración a Raimundo Valenzuela, quien se presentó como inversionista activo de la bolsa, y quien llegó a comprar unos $ 5 mil millones en acciones de Norte Grande y Oro Blanco "considerando el descuento" que tenían dichos instrumentos.
"Dado que las acciones de estas empresas cascadas empezaron a sufrir fuertes pérdidas es que llegué a perder una cifra aproximada de $ 1.500 millones a diciembre del año 2011"
Producto de esa pérdida encargó un análisis de cada una de las operaciones de las sociedades cascadas. El resultado es que había "una serie de operaciones en las cuales hay un perjuicio claro en contra de las sociedades cascadas. El análisis demostraba que relacionados a Julio Ponce Lerou, generalmente compraban barato y vendían caro. Curiosamente, el inverso de estas operaciones, es decir, vender barato y comprar caro, usualmente era a las sociedades cascadas".
"Asimismo, le mostré este informe a Pablo Guerrero, abogado y director de algunas de las cascadas, manifestándole mi preocupación respecto de estas operaciones. Él me señaló que según la información que le había manifestado la administración de las sociedades cascadas, este documento era completamente falso".