Pese a que apenas fue nombrado fiscal regional Metropolitano Sur, una de las primeras decisiones del abogado Raúl Guzmán fue inscribirse en la Asociación Nacional de Fiscales (ANF), esta semana sus vínculos con el gremio terminaron.
Fue de forma abrupta, según relatan dirigentes, y el motivo lo habría explicado en una larga carta en la que -entre otros temas- alude a una agresión que recibió en 2016 en el Metro y cuya situación no motivó ninguna declaración de respaldo del gremio. A esto se suma una ofensiva de la ANF por supuestas "prácticas antisindicales" de Guzmán -quien lidera los denominados casos bombas- en contra de un fiscal que es dirigente de la Fiscalía Sur y que habría obtenido una nota 3,5 en la última evaluación, causal de expulsión.
Guzmán aseguró que dichas acusaciones eran falsas y que había recibido un trato inaceptable, lo que lo llevó a dimitir de la asociación esta semana.