El Real Madrid tiene una relación especial con la Liga de Campeones de Europa. Más bien, es un idilio permanente entre el cuadro merengue y el torneo de clubes más relevante del fútbol. Una nueva muestra de aquello se dio en Cardiff. En Gales, bajo techo, el equipo de Zinedine Zidane venció a la Juventus y vuelve a coronarse en la Champions. Una historia repetida, pero siempre especial.
Fue la Juve el cuadro que empezó mejor. Presionando alto, en campo rival, no dejó que el Madrid pudiera salir con comodidad. De hecho, fue Keylor Navas quien sostuvo el resultado. No obstante, ese impulso se fue disipando con el correr del tiempo, y darle espacio a los merengues para que despierten puede ser letal.
Cristiano Ronaldo tenía un partido ingrato, en el cual no gravitaba. Pero la primera que tuvo significó la apertura de la cuenta. Minuto 20. Gran jugada colectiva del Madrid y el artillero portugués saca un remate, tras pase de Dani Carvajal, que se desvía en Bonucci. La Casa Blanca, que vistió de morado, abrió la cuenta gracias a su goleador, ese mismo que igualaba a Lionel Messi como el máximo goleador de esta edición de la Champions (11).
Ambos elencos, con maneras distintas, nunca renunciaron a buscar la victoria. Tanto así que una defensa conocida por su solidez como la Vecchia Signora se vio desordenada. Siete minutos después del tanto de Cristiano, una acrobacia de Mario Mandzukic puso el empate. Con una media chilena dispara y el balón le pasa por arriba a Navas. Un golazo para una final abierta y pareja, de un pronóstico muy reservado. Así se fueron al descanso.
Todo lo bueno que hizo la Juventus en la primera parte se borró de golpe. Resulta extraño explicar qué le pasó al hexacampeón de la Serie A. Bueno, el rival también tiene parte en esto. Real Madrid puso el pie en el acelerador y mostró su impronta de monarca, ante una Juve muy defensiva. Casemiro se transformó en un héroe inesperado, en el jugador que comenzó a desequilibrar la final. En los 61', saca un remate desde fuera del área, que se desvía en Khedira. La estirada de Buffon fue insuficiente.
Juventus estaba aletargada, pero faltaba una nueva aparición de Cristiano Ronaldo. Tres minutos después del gol de Casemiro, el luso conecta en el área chica un centro de Luka Modric para cerrar una victoria que fue más holgada que lo previsible. Tanto así que Keylor Navas tuvo nula actividad en el complemento. Los turineses acabaron el partido con 10, por la expulsión de Juan Guillermo Cuadrado, luego de una falta sobre Ramos.
Para hacer la fiesta más grande, en los 90', Marco Asensio anotó el 4-1, tras un notable desborde y pase de Marcelo, una de las figuras de la noche británica.
Con justicia, el Real Madrid se queda con la Orejona, la duodécima de su laureada historia. El más campeón de la Liga de Campeones hizo historia en Cardiff, la tierra de los Dragones. Se convirtieron en el primer club que defiende la corona bajo el actual formato de la Champions. La última vez que se dio un bicampeonato fue con el Milan de Arrigo Sacchi, en las temporadas 1988-1989 y 1989-1990. Es su tercera consagración en las últimas cuatro campañas.
El Madrid y la Champions, un romance que no se quiebra.