El galés Gareth Bale regresó a los terrenos de juego 88 días después de caer lesionado, disputando 19 minutos del duelo liguero ante el Espanyol y firmando la sentencia para un Real Madrid que batió un récord al marcar en 42 partidos consecutivos.
Recibió Bale el cariño de la afición del estadio Santiago Bernabéu, tras poner fin a su odisea tras ser operado el 29 de noviembre de una lesión en los tendones peroneos del tobillo derecho. Y lo celebró por todo lo alto. Acaparando titulares y portadas con un gol que define sus características y una efusiva celebración.
Desde que comenzase a calentar en el tiempo de descanso, los seguidores madridistas premiaron con aplausos el trabajo de Bale para regresar a los terrenos de juego. Finalmente, 88 días después comenzó a coger ritmo de competición al entrar a los 71 minutos de un partido que marchaba 1-0, en lugar de Álvaro Morata y ubicándose en su sitio natural, la banda izquierda, pasando al portugués Cristiano Ronaldo a la zona del nueve.
Con rapidez entró en el partido, participativo en las acciones y queriendo protagonismo. El premio lo encontró a siete minutos del final, cuando en un rápido contragolpe lanzó un desmarque al espacio que vio Isco Alarcón. El pase en profundidad lo culminó Bale con un gran disparo cruzado que entró a la portería defendida por Diego López ajustado al poste.
En el tiempo de baja de Bale el Real Madrid vio cortada su racha de partidos invictos, que cerró en 40. Con el galés esta temporada lo ha ganado todo. Con el del Espanyol, el galés ha participado en 17 encuentros y firma pleno de victorias.
El encuentro lo rompió el tanto de un Álvaro Morata que aprovecha al máximo sus minutos. Venía de jugar tan solo 90 en los siete últimos partidos del Real Madrid y tras marcar a la Real Sociedad, repitió en su primera titularidad de 2017 con un potente testarazo tras otra asistencia de Isco.
El equipo de Zinedine Zidane sigue inscribiendo su nombre en registros históricos del club y es el primero que marca en 42 partidos consecutivo. Comenzó la racha en la jornada liguera 36 del pasado curso con un triunfo en Anoeta (0-1) y desde entonces no ha habido partido en el que los jugadores madridistas no hayan marcado.
Hasta la fecha entre 1951 y 1952 con Ipiña como entrenador, entre 1987 y 1989 con el holandés Leo Beenhakker y entre 2011 y 2012 con el portugués José Mourinho, se habían alcanzado 41 partidos marcando. Zidane firma su segundo récord como entrenador madridista tras haber firmado la mejor racha sin perder de la historia de un club español con 40 encuentros.