El Museo de Historia Natural, ubicado en el Central Park, está organizando su tradicional "Noche en el museo", pero para los adultos, inspirado en el éxito de estas convocatorias organizadas para los niños desde el 2007.

Quienes participen en esta iniciativa que se realizará el 1 de agosto, podrán dormir bajo la estrella del museo: una ballena azul de 26,65 metros y 9,54 toneladas, la reconstrucción en fibra de vidrio de un ejemplar hallado en 1925.

Después de una recepción con champán y orquesta de jazz, los asistentes tendrán las cuatro plantas del museo a su disposición, podrán recorrer tranquilamente en las 45 salas de exposiciones permanentes, se encontrarán cara a cara con un grupo de elefantes africanos, admirarán esqueletos de dinosaurios e irán a medianoche al planetario para el espectáculo "Universo oscuro".

Además, el encargado de la exposición temporal sobre los venenos, Marcos Siddall, asistirá a charlar con ellos. También podrán disfrutar de una exposición temporal de arañas y tarántulas vivas.

El programa incluye asimismo una actividad para encontrar fósiles con linterna.

La cena, colación y el desayuno están incluidos, al igual que las camas, no así los sacos de dormir, almohadas, cepillo y pasta de dientes. E incluso si se trata de pasar la noche allí, se pide a los participantes que lleven "ropa cómoda", pero no pijamas.

La "Noche en el museo" comenzará a las 18:30 y terminará a las 09:00 de la mañana siguiente. El costo será de 375 dólares por participante (unos 210 mil pesos chilenos).

Pero el elevado precio no desanimó a los aficionados, pues las 150 entradas disponibles para esta primera noche de adultos en el museo se vendieron "en algunas horas", dijo un portavoz.

Las noches para niños (de 6 a 13 años) comenzaron en enero de 2007, desde cuando la han disfrutado unos 62.000 niños.

El Museo de Historia Natural de Nueva York cuenta con una colección de más de 32 millones de especímenes y objetos, mamíferos, insectos y aves del mundo entero y de destacadas colecciones antropológicas.

Un piso entero está dedicado a la evolución de los vertebrados. También se puede admirar el zafiro azul más grande del mundo, la "Estrella de la India".