Mientras siguen los intentos rebeldes por llegar a Sirte, la ciudad natal de Muammar Gaddafi, desde Doha, en una reunión con países que apoyan a los insurgentes, el titular del Consejo Nacional de Transición libio, Mustafa Abdel Jalil, advirtió hoy que el coronel sigue constituyendo una amenaza para Libia y pidió a la OTAN que mantenga las operaciones de  "protección" contra "este tirano".

El avance rebelde ya controla Naufaliya, unos 120 kilómetros al este de Sirte y también la carretera entre Trípoli y Sebha, una ciudad en el desierto central del país que es otro de los feudos restantes del régimen. Además, el CNT sigue negociando con líderes tribales de Sirte un traspaso pacífico del poder.

Paralelamente, la Unión Europea trabaja en la posibilidad de  aliviar las sanciones impuestas a Libia, con la abolición en una  primera etapa de las medidas restrictivas en seis puertos, para  ayudar al Consejo en la etapa de reconstrucción del país. Así lo aseguraron fuentes europeas en Bruselas, quienes  dijeron que Italia es uno de los países que apoya esa medida y  Reino Unido pidió retirar a las entidades portuarias de las  empresas sometidas a sanciones.

En tanto, al embajada francesa en Trípoli fue reabierta,  informó hoy el gobierno en París, tras el arribo de una  delegación diplomática a la capital. Se informó, además, que conferencia "Amigos de Libia" se realizará en París el 1 de septiembre encabezada por el Presidente, Nicolas  Sarkozy, con participación de unos 50 países, entre ellos China  y Rusia.

EMERGENCIA SANITARIA
A medida que las reformas políticas avanzan en Libia, Trípoli afronta el riesgo de una "epidemia sanitaria sin precedentes" a raíz de la emergencia hídrica en la capital, advirtió hoy la Unicef, que aumentó sus esfuerzos  para la distribución de agua en la ciudad.

El organismo entregó unas 23 mil botellas de agua y distribuirá en  las próximas horas otras 90 mil, mientras en total unos cinco millones de litros serán puestos a disposición en la ciudad.

El responsable de la oficina de Unicef en Libia, Christian  Balslev-Olesen, dijo que están respondiendo "a las necesidades  inmediatas en Trípoli, pero estamos extremadamente preocupados  por la situación". "Esto podría transformarse en una epidemia sanitaria sin  precedentes", subrayó.

Por otra parte, los archivos de las prisiones en Libia y  otros documentos de gran importancia podrían perderse si  persisten las condiciones de inseguridad en los centros de  detención, advirtió hoy Amnistía Internacional.

La delegación de dicho organismo presente en Libia pidió al Consejo  Nacional de Transición proteger los documentos en lugares  seguros y lograr la restitución de los archivos que fueron  robados.  "Los archivos de las prisiones y otras pruebas pueden ser de  gran importancia para futuros procesos relativos a crímenes  cometidos bajo el régimen del coronel Muammar Gaddafi", dijo  Claudio Cordone, de la organización humanitaria.

Cordone sostuvo que "estas pruebas podrían aportar  informaciones sobre los prisioneros desaparecidos en Libia en  las últimas décadas, comprendidas las miles de personas  capturadas por las fuerzas de Gaddafi desde el inicio de la  revuelta".