En un 59% disminuyó, entre 2012 y 2015, la recaudación que realiza el Fondo Nacional de Salud (Fonasa), por los copagos de las prestaciones del Plan de Garantías Explícitas de Salud (Auge/Ges) recibidas por beneficiarios del seguro público, según información entregada mediante Transparencia a La Tercera.

Los datos de  Fonasa revelan que mientras en 2012 el monto que se recolectó fue de $ 1.127 millones, el año pasado el total recaudado fue de $ 458 millones. Esto, pese a que las cifras muestran un aumento de 22% en la cantidad de prestaciones Auge realizadas en el mismo período, pasando de 2.766.578 en 2012 a 3.371.897 en 2015 (ver infografía).

Este programa entró en vigencia en 2005 y da acceso a atenciones de salud a quienes padezcan alguna de las 80 patologías cubiertas en el plan, que además ofrece las garantías de acceso, oportunidad, calidad y protección financiera. Sin embargo, aunque la atención no tiene costo para las 7,5 millones de personas que están en los tramos A y B, para los clasificados en los grupos C y D -que llegan a 5,7 millones de afiliados-, el copago por las prestaciones corresponde al 10% y 20%, respectivamente, del total del arancel.

Esta clasificación de niveles  se realiza mediante el ingreso económico que recibe el afiliado. Así, en A y B se encuentran personas que no tienen recursos económicos o son inferiores a $ 257.500, mientras que en el tramos C  están los beneficiarios que superan esa cifra y en el D quienes obtienen remuneraciones de más de              $ 375.500.

Para realizar el cobro de las prestaciones realizadas en centros de salud pública, Fonasa envía al domicilio del beneficiario la cartola en la que se detallan las atenciones otorgadas, información que proporciona el establecimiento de salud donde se realizó la prestación. En los casos necesarios se dan facilidades: la deuda por estos copagos puede ser cubierta en forma total o parcial por un préstamo médico que concede el seguro público.

"El problema es que hay una práctica regresiva, y es que el Auge es tan gratuito para un beneficiario D como de nivel A, porque no están los métodos para cobrar estos copagos. Es un falencia en la gestión de Fonasa", explica Jaime Mañalich, ex ministro de Salud y actual académico de la Universidad de Los Andes.

Respecto al alza en las prestaciones y a la baja en la recaudación, Luis Castillo, académico de la Universidad San Sebastián y ex subsecretario de Redes Asistenciales, apuntó a la administración de Fonasa: "Aumentó el número de prestaciones Auge, pero la recaudación disminuyó. Eso quiere decir que tiene que haber existido una dificultad en la recolección de los copago, es decir, un problema de gestión".

Los expertos plantean que el sistema de cobranza de Fonasa tendría deficiencias que causan la falta de recaudación. De acuerdo a  Manuel Inostroza, consejero del Auge y académico de la Universidad Andrés Bello, este sistema "no ha estado preparado ni política ni técnicamente para hacer estas recaudaciones y me extraña que, como sistema, nadie se haya hecho cargo, porque en estricto rigor estos son recursos considerados en la Ley de Presupuesto, pero que al final nadie recauda".

Deuda hospitalaria

Mañalich, por su parte, añade que el problema de la falta de recaudación de los copagos incide en la deuda hospitalaria, ya que "Fonasa tiene la obligación de recaudar y como no lo hace, porque no tiene los sistemas de cobro, lo que ocurre es que los hospitales reciben por la atención sólo la parte que les paga Fonasa y no el copago de los pacientes, y eso se transfiere en deuda".

Respecto a esto, Héctor Sánchez, director del Instituto de Salud y Futuro de la Universidad Andrés Bello, hace hincapié en que, aunque sí existe un problema de gestión, la recaudación es una cifra menor en el universo del déficit en el sistema público: "El monto es marginal, comparado con el tamaño de la deuda hospitalaria. Hay un tema de ineficiencia, pero no es de tanta envergadura. Suponiendo que Fonasa resolviera este problema, no se resolvería el de la deuda hospitalaria".

En la misma línea, Oscar Arteaga, director de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, recalca que "en comparación con el total de recursos que se manejan en el sector, los copagos siempre han sido muy marginales, no es una fuente de financiamiento significativo".

El ex subsecretario Castillo remarca que, si fuera posible recaudar la deuda total "con el nivel de frecuencia de prestaciones Auge, la cifra debería andar por los miles de millones de pesos. Debería ser sobre los cinco mil millones, por lo bajo".

La Tercera contactó a Fonasa para obtener su versión sobre el tema, pero el servicio no hizo declaraciones.