El proyecto de Presupuesto 2015 no dejó conforme a las universidades estatales y tampoco a las tradicionales privadas. Ambos grupos conforman el Consejo de Rectores (Cruch), donde en el último año se han presentado fuertes diferencias con respecto al trato que el Estado debe dar a uno y otro tipo de instituciones. Sin embargo, la "insuficiencia" que, a juicio de los rectores, presenta la propuesta del gobierno, motivó que se unieran en busca de "un frente común".

La idea de dejar las diferencias atrás y generar un plan conjunto surgió del vicepresidente del Cruch y rector de la U. de Santiago, Juan Manuel Zolezzi, quien el viernes acordó con el presidente del G9, Ignacio Sánchez; el presidente del Consorcio de Universidades Estatales (Cuech), Aldo Valle; y el presidente de la Agrupación de Universidades Regionales (AUR), Patricio Sanhueza; realizar una reunión durante esta tarde.

Zolezzi indicó que este encuentro apunta a "generar un frente común, porque el presupuesto es insuficiente". Y agregó que "queremos ponernos de acuerdo para las conversaciones que se vienen con el gobierno y el Congreso".

En tanto, el rector Sánchez señaló que, en términos de financiamiento mediante el Aporte Fiscal Directo (que se reparte entre los 25 planteles del Cruch), el déficit es, al menos, del 50%. La propuesta del gobierno es de $ 202 mil millones para 2015, pero, según el Cruch, se necesitan al menos unos $ 100 mil millones adicionales. "Además de que faltan recursos, falta asegurar un proceso paulatino y constante de aumento de financiamiento para permitir el desarrollo", dijo Sánchez.

DISCREPANCIAS

El encuentro de hoy será clave para resolver las diferencias entre los rectores del Cruch que partieron en 2013, cuando los planteles estatales enviaron a la entonces candidata Michelle Bachelet, una propuesta de financiamiento que incluía sólo a ese grupo de instituciones de educación superior. Esto molestó a los rectores del G9 -que agrupa las universidades privadas tradicionales-, quienes también elaboraron un documento que fue presentado tanto a Bachelet como a la ex candidata de la Alianza, Evelyn Matthei.

El quiebre llegó cuando el 19 marzo, el Cuech envió al Mineduc una propuesta para crear una División de Universidades Estatales, la que sólo fue conocida en la reunión del consejo realizada el 27 de ese mes. Ese día, el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, quien presidía por primera vez el Cruch, dijo que "según lo establece el programa de Michelle Bachelet, las universidades estatales tendrán un trato preferencial".

La polémica se repitió cuando en la sesión de julio, se confirmó que habría aportes específicos para las universidades estatales en el presupuesto 2015. Esto se concretó con una glosa especial de convenio marco, de $ 34 mil millones.

CRÍTICAS COMUNES

Pese a contar con fondos específicos, los planteles del Estado no quedaron conformes con el monto propuesto. Y en el caso de las tradicionales privadas, consideran que fueron discriminadas por no contar con fondos especiales. Ante esto, el presidente del G9 planteó que "el ideal aquí es trabajar en forma común. Debido a la solicitud de un aporte preferente de las universidades estatales, estos frentes han tenido que ser diversos, pero nosotros desde el G9 vamos a seguir trabajando para que haya un acuerdo al interior del Consejo de Rectores y una propuesta común hacia afuera".

Al respecto, Sánchez dijo que "es una reunión importante y tenemos que llegar con una propuesta única al Congreso, para tratar de revertir las inequidades de presupuesto".

Por su parte, el presidente del Cuech dijo que "más allá de las diferencias internas, nos preocupan los temas que no han sido debidamente atendidos por los recursos públicos en las últimas décadas". Entre estos, Aldo Valle señaló el futuro de la investigación científica y el sistema de aseguramiento de la calidad.