Fue esta la conclusión de un novedoso experimento realizado por el mediático profesor de la Universidad británica de Hertfordshire, Richard Wiseman, cuyos estudios han abarcado desde la risa hasta la suerte. Esta vez decidió hacer participar a más de 26 mil personas vía internet en una prueba para determinar la efectividad de ciertas técnicas diseñadas para levantar el estado de ánimo.
Los participantes estuvieron una semana probando diversas estrategias. Un grupo tenía que recordar algún evento agradable expermientado durante las 24 horas previas, mientras otros grupos se dedicaron a realizar actos de amabilidad, expresaban gratitud con frecuencia o sonreían todos los días al menos durante 15 segundos. Un grupo de control, en tanto, tenía que pensar en lo que habían hecho el día anterior, pero sin centrarse en nada en particular.
Los resultados indican que la mejor técnica de todas es recordar alguna situación agradable o positiva registrada el día anterior. El grupo que realizó este ejercicio mostró una mejora de 15% en su estado de ánimo comparado con el grupo de control y se mostró más satisfecho que aquellos que habían ejercitado con otras técnicas, asegura Weiseman. Los actos de amabilidad, por ejemplo, también aumentaron la felicidad de las personas, pero sólo en 9%. Ser agradecido, en tanto, mejoró el ánimo en un 8%. La risa diaria por 15 segundos también funcionó, otorgando un aumento de 6% en el estado de ánimo.