El mismo día que comenzó la discusión del proyecto que modifica el actual sistema electoral en la Cámara de Diputados, representantes de la UDI anunciaron que presentarán un proyecto alternativo a la reforma. Para esto, miembros de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia de la Cámara Baja, estudiarán distintas medidas sobre la base de proponer un sistema uninominal.

¿Cuáles son las diferencias entre el sistema propuesto por el gobierno y el propuesto por el gremialismo?

CAMBIO DE SISTEMA

En la reforma enviada por la Presidenta Michelle Bachelet se propone pasar de un sistema binominal - que contempla dos candidatos por circunscripción y distrito - a uno proporcional inclusivo, con el se reducen las disparidades entre el porcentaje de la votación obtenida por partido y los escaños parlamentarios que le corresponden. De esta manera, se pretende corregir la subrepresentación de las regiones más pobladas del país y poner fin al arrastre de las listas representantes de los grandes bloques políticos

Este sistema "exige avanzar en la igualdad de voto. No puede ser que los territorios más poblados elijan la misma cantidad de representantes que los sectores menos poblados", sentenció Bachelet.

Por su parte, en la propuesta alternativa de la UDI se pretende pasar a un sistema uninominal, en el cual cada circunscripción elija a un candidato el que será electo con la mayoría de los votos. Este mecanismo electoral es el mismo que se usa en Inglaterra pero que sus propios políticos quieren cambiar por encontrarlo poco representativo.

AUMENTO DE PARLAMENTARIOS
El proyecto del gobierno plantea un aumento de 47 nuevos legisladores, lo cual significará mayor cantidad de parlamentarios en algunas regiones del país.  Así, el total de senadores pasaría de los actuales 38 a 50, y el total de diputados crecería de 120 diputados a 155. Por otro lado, el gobierno asegura que esta iniciativa no generará un costo extra para el Estado.

"Esto debe ser costo cero para el estado chileno", recalcó el ministro de Interior, Rodrigo Peñailillo. Además, precisó que el Parlamento tiene cuatro años para hacer las reasignaciones necesarias para que en el Presupuesto 2018 se pueda financiar la reforma.

Desde el gremialismo en tanto, esta iniciativa es rechazada argumentando que al Estado le costaría US$100 millones por período parlamentario financiar este aumento.

"Creemos que no es necesario que el Estado crezca, eso va a salir del bolsillo de todos los chilenos.  Es impresentable teniendo a la vista la gran cantidad de necesidades que tiene el pais. Además, creemos que es una mala señal decir que los problemas se solucionan con más parlamentarios.

"Basta con poner por sobre los intereses de los politicos los intereses de la ciudadanía", expresó el diputado UDI y miembro de la comisión de Constitución, Arturo Squella.

REDISTRITAJE
La fórmula del Ejecutivo plantea reducir de 60 a 28 distritos, en que cada uno de ellos eligirá entre tres a ocho diputados. Además, propone transformar cada región en una circunscripción, pasando así de 19 circunscripciones a 15. De esta manera, la Región Metropolitana ya no elegirá a cuatro senadores, sino a siete. Las regiones restantes elegirán entre siete a dos miembros de la Cámara Alta, dependiendo de la región. Con esta iniciativa el gobierno buscaría mayor representatividad y otorgarle mayor valor al voto de los electores.

La UDI por su parte, con el sistema uninominal se muestra a favor de tener 120 diputados para 120 distritos, es decir, aumentar el número de distritos de 60 a 120, con un diputado cada uno. Ante las críticas a la falta de proporcionalidad por parte del oficialismo, el diputado Squella asegura que, si bien es imposible lograr que todos los distritos tengan la misma cantidad de electores, se puede tratar de corregir para logara mayor igualdad  y que "cada elector tenga el mismo peso".

LEY DE CUOTA DE GÉNERO
"Este proyecto establece por fin una cuota de género", para que ningún partido presente más de un 60% de candidatos de un mismo sexo, explicó la Presidenta Michelle Bachelet. Para esto, se entregarán incentivos econóimicos a los partidos que logren mayor cantidad de candidatas electas.

Sin embargo, para el gremialismo esta iniciativa corresponde a "un mecanismo artificial de cuotas" que finalmente "coharta la libertad del elector y de los partidos políticos" de escoger a quien estimen conveniente para el cargo. Según la falange, la mayor inclusión de las mujeres en la política tienen que nacer desde los mismos partidos, no ser autoimpuesto por una ley, según explicó Squella.

Si el sistema electoral uninominal propuesto por el gremialismo no tiene acogida una vez entregado a la directiva de la UDI, la comisión estudiará una segunda alternativa que consiste en un sistema proporcional corregido, que no implique un aumento en el número de parlamentarios.