La guerra interna en Libia entre partidarios y detractores del régimen de Muammar Gaddafi, que ya se extiende por cinco meses, ha mermado las arcas del régimen. A juicio del ministro de Planificación y Finanzas, Abdulhafid Zlitni, la guera le ha costado a su gobierno unos 50 mil millones de dólares.

Un gasto "colosal", dice el personero, quien admite que la suspensión de las exportaciones de gas y petróleo han gatillado buena parte de este escenario.

"La pérdida de ingresos debida a la paralización de la exportación de petróleo es de unos 20.000 millones de dólares", dijo el ministro a la cadena CNN.

El año pasado la economía libia crecía a un ritmo del 10,3%, según datos del FMI. Un informe del 15 de febrero, concluía que "el pronóstico de la economía libia continúa siendo favorable". Sin embargo, dos días después comenzaron en Bengasi las protestas contra el coronel, que acabaron porr extenderse por todo el país y a las que el régimen respondió con represión.

La guerra civil casi ha destruido los planes ambiciosos para modernizar el transporte, la vivienda y la infraestructura en un país que ha sido durante mucho tiempo aislada de la comunidad internacional, apunta el ministro.

Además, la guerra gatilló que abandonaron el territorio un número elevado de empleados extranjeros que trabajaban en la construcción de ferrocarriles, aeropuertos, edificios y redes de telecomunicaciones. Ingenieros, obreros y los trabajadores del petróleo procedentes de China, Turquía, Egipto y Filipinas, cruzaron a pie la frontera oeste con Túnez.

"Esto no debería prolongarse. De lo contrario nos estaremos comiendo la grasa y la carne, y muy pronto llegaremos a los huesos", dijo Zlitni sobre quien pesa una prohibición de viajar al exterior dictada en junio por el Consejo de Seguridad de la ONU.

Respecto a entregar a los rebeldes fondos del gobierno, como lo han propuesto algunos de los países aliados de la OTAN, Zlitni dijo que eso "va en contra de las leyes internacionales (...) Si congelas fondos de cualquier país a través de la acción del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, entonces no puedes confiscarlos. Los bancos tienen obligaciones legales"

La semana pasada, la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton anunció que Washington reconocía formalmente al Consejo de Bengasi como autoridad gobernante. Funcionarios del Departamento de Estado indicaron que esto podría dar acceso a Bengasi a unos 30 millones de dólares en fondos congelados de Libia en Estados Unidos.