El régimen de Basher Assad anunció hoy la liberación de 225 detenidos que no han cometido delitos de sangre en la provincia de Damasco y su periferia, según la agencia de noticias oficial siria, Sana, mientras  los rebeldes sirios multiplicaron sus ataques contra la Fuerza Aérea del régimen.

Según Sana, los presos estaban "implicados en los sucesos recientes", sin dar más detalles.

El régimen de Damasco ha llevado a cabo periódicamente liberaciones de detenidos, aunque, según denuncia la oposición siria y organizaciones no gubernamentales, miles de personas siguen detenidas.

La televisión siria informó de que las autoridades prosiguieron hoy con operaciones militares contra objetivos "terroristas" en la provincia de Alepo y su capital homónima, en el norte del país. Mientras, desde hace algunos días, los rebeldes apuntan sus ataques a las bases  aéreas y a los aviones del ejército, afirmando haber destruido una decena de  helicópteros y aviones para limitar el dominio del cielo de la aviación siria.

Una unidad del ejército lanzó un ataque en la aldea de Rasm Al Abud, en el este de la provincia, en el que "un gran número de terroristas" perdieron la vida y fueron destruidos varios vehículos pertrechados con ametralladoras y aparatos de comunicación, dijo la cadena.

El viernes en la noche, los rebeldes se apoderaron del edificio principal  de una base aérea en la ciudad de Bukamal, en la provincia de Deir Ezzor, al este del país, cerca de la frontera con Irak, según el Observatorio Sirio de Derechos  Humanos.

Los rebeldes también atacaron en Bukamal el edificio de seguridad del  ejército así como el aeropuerto militar de Hamdan. Los insurgentes, que controlan el puesto fronterizo de Bukamal desde  mediados de julio, intentan tomar el control total de esta ciudad.

En tanto, Rusia, uno de los principales aliados de Damasco, estimó hoy que sería "ingenuo" pensar que el presidente sirio será el primero en retirar sus tropas, en respuesta a las declaraciones de la víspera del  secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, para quien la principal  responsabilidad del fin de las violencias recae en el régimen.