El régimen de Bashar Assad descartó hoy que Siria afronte una guerra civil y consideró que se trata de "combates contra grupos armados que eligieron el terrorismo" y "conspiran contra el presente y el futuro" del país.
La cancillería siria, en un informe difundido por la agencia oficial Sana, manifestó "estupor" por los conceptos usados ayer por el secretario general adjunto de Naciones Unidas para las Operaciones de Paz, Hervé Ladsous, quien dijo que el país se encuentra en una guerra civil.
Damasco anunció hoy, por otra parte, la liberación de 500 personas detenidas por razones políticas, pero Naciones Unidas y organizaciones humanitarias advirtieron que son más de 10 mil quienes fueron arrestados desde el inicio de las protestas y la represión, en marzo de 2011.
Las personas liberadas, reportó la agencia Sana, "no tienen manchadas las manos de sangre", en lo que Damasco considera acciones de grupos terroristas favorecidos por un complot organizado por otros países.