El gobierno sirio de Bashar al Assad rechazó "totalmente" cualquier plan de enviar fuerzas armadas árabes al país y argumentó, a través de un comunicado de su cancillería, que "el pueblo rechaza cualquier intervención extranjera en sus asuntos, bajo cualquier pretexto y enfrentaría todo intento de violar la soberanía siria y la integridad de sus territorios"
La posibilidad de enviar contigente al país norteafricano para frenar la violencia, surgió del jeque de Qatar, Hamad bin Khalifa Al Thani. Dicho país, que antes tenía relaciones estrecha con Damasco, ha criticado duramente la represión y retiró a su embajador de Siria meses atrás. Desde el comienzo de la Primavera Arabe, hace más de un año, Qatar ha incrementado su influencia en la región al cumplir un papel activo.
La represión del régimen de Assad ha dejado miles de muertos durante la insurrección y se ha incrementado el riesgo de caer en la guerra civil. Según la ONU, unos 400 muertos en las últimas tres semanas se sumaron a las más de 5.000 víctimas desde marzo.
El jeque de Qatar, Hamad bin Khalifa Al Thani, dijo el domingo que se deberían enviar fuerzas árabes a Siria para detener la violencia, en las primeras declaraciones en ese sentido por parte de un líder árabe.
Qatar, que antes tenía relaciones estrecha con Damasco, ha criticado duramente la represión. El país del Golfo Pérsico retiró a su embajador de Siria meses atrás. Desde el comienzo de la Primavera Arabe, hace más de un año, Qatar ha incrementado su influencia en la región al cumplir un papel activo.
"El pueblo sirio rechaza cualquier intervención extranjera en sus asuntos, bajo cualquier pretexto y enfrentaría todo intento de violar la soberanía siria y la integridad de sus territorios", dijo la cancillería en un comunicado.
El gobierno dice que la insurrección no es impulsada por reformistas sino por terroristas y que pandillas armadas actúan al servicio de una confabulación extranjera para desestabilizar el país.
La agencia noticiosa estatal SANA informó el martes que un "grupo terrorista armado" atacó el lunes por la noche con lanzagranadas un retén militar a unos nueve kilómetros al suroeste de Damasco, con un saldo de un oficial y otros cinco efectivos muertos.