Debido a los antecedentes que se han conocido públicamente, respecto de las fallas en el nuevo sistema de identificación, que está a cargo de la empresa francesa Morpho, el contralor Ramiro Mendoza decidió realizar una investigación al interior del Registro Civil.

Se trata de una auditoría que permitirá revisar la manera en que está operando la entrega de cédulas y pasaportes, además de establecer si se han producido irregularidades.

La Contraloría tenía presupuestada una auditoría en el servicio para 2014, de acuerdo con su planificación interna, pero debido a todas las informaciones que hay respecto de fallas en el nuevo sistema se decidió adelantarla.

Claudia Gallardo, directora transitoria y provisoria del R. Civil, indicó que "para mí, como directora, que asumí hace dos semanas, es una muy buena noticia contar con la colaboración de la Contraloría General de la República para que nos apoye en los procesos de normalización en que nos encontramos abocados".

Gallardo agregó que recibió el lunes el oficio del organismo de control, "que dice que se dará inicio a una visita al servicio de Registro Civil con el fin de realizar una auditoría de tecnologías de la información". Al respecto dijo que "esto es complementario a lo que estamos haciendo, y he solicitado a la Contraloría que dentro de sus posibilidades agilicen los tiempos de realización de la investigación para que sea un insumo más con el que yo cuente para la toma de decisiones".

La autoridad señaló que "pondré a disposición todos los antecedentes que he recopilado en estas dos semanas de ejercicio en el cargo, de tal manera de colaborar al máximo para que se transparente cualquier anormalidad que pudiese existir".

En tanto, diversos informes internos del Registro Civil dan cuenta de la demora, por parte de Morpho, en la resolución de distintas fallas detectadas en el proceso de captura de las solicitudes de nuevas cédulas y pasaportes.

En un correo del 5 de noviembre se plantean 15 temas que han tenido demora en ser resueltos. Por ejemplo: "Se ha solicitado en innumerables ocasiones" que Morpho realice una revisión diaria de los equipos, para asegurarse de que las solicitudes de cédulas y pasaportes se despachen a nivel central. También se indica que se han detectado 183 casos en que la parte superior de la cabeza aparece cortada cuando se toman las fotografías.

Y se cuestiona que la empresa no ha cumplido con los plazos definidos en la marcha blanca, "en su mayoría no se cumplieron y, por lo tanto, se están volviendo a agendar, como si fuese la primera vez que los vemos", plantea el documento.

"Yo estoy tomando todas las informaciones internas para ordenar todos esos antecedentes, priorizarlos y darles plazos concretos de solución", sostuvo la directora.