Señor director:

Soy inmigrante y llevo tres años en Chile. Revalidar mi título británico de dentista ha sido un proceso retrógrado y kafkiano. Sin duda deben existir procesos que aseguren un nivel de competencia para brindar garantías al público, no obstante, el procedimiento actual es tan pedregoso que en nueve años ha revalidado 66 títulos.

Vine desde Londres confiando en el sistema, para terminar descubriendo que es oscuro, injusto e irresponsable. Se han violado los derechos de  decenas  de odontólogos que de buena fe pagamos  las 20 UTM y sacrificamos tiempo, familia y dinero, esperando que las normas se cumplieran.

En 2015 expuse a la facultad responsable de dicho proceso en una investigación realizada por una revista de circulación nacional, por infringir normas de bioseguridad y radioprotección que ponían en riesgo a cada postulante. También se ha violado la ley de protección de datos. Desde entonces he escrito tres veces al rector de esa casa de estudios, y luego de casi dos años he obtenido respuesta, pero sin que ésta conteste a las preguntas y críticas que he hecho.

La universidad ha vulnerado el reglamento de revalidación y ha violado los períodos reglamentarios de calendarización, incluso poniendo exámenes de un día para otro.

El reglamento no está solo para ser cumplido por postulantes, sino también por el ente regulador.

Diego Jazanovich