Una penosa postal dejó la tradicional peregrinación al Santuario de Lo Vásquez, en la que participaron casi un millón de personas el pasado fin de semana: más de 30 toneladas de basura arrojadas, según la Gobernación de Valparaíso, en la carretera y calles aledañas.

El alcalde de Casablanca, Rodrigo Martínez, afirmó que esta situación se ha vuelto común tras la festividad de la Inmaculada Concepción en la comuna y los millares de fieles que llegan al santuario. Eso, pese a que este año se instalaron dispensadores en uno de los tramos.

"Pasa un millón de personas, así que queda una cantidad de basura enorme. Hay una increíble falta de cultura en lo que es aseo", explicó Martínez.

En el tramo que corresponde a la Ruta 68, está a cargo de la limpieza  la concesionaria Abertis.  El municipio, por su parte, deberá desmbolsar cerca de dos millones de pesos para licitar el lavado  de los caminos laterales a la carretera, principalmente la ruta antigua hacia Santiago.

El gobernador de Valparaíso, Omar Jara, aseguró que se necesitarán por lo menos 48 horas y unos 50 trabajadores para poder sacar toda la basura acopiada.

Para evitar que esta situación se repita en las futuras celebraciones, Martínez presentó un proyecto al gobierno regional, que busca adquirir basureros removibles para instalarlos en los sitios por donde transitan los peregrinos.

"Queremos comprar unos contenedores de fierro, para poder tenerlos ahí en distintos sectores y después sacarlos", indicó el edil.

Frente a esta idea, Jara se mostró contrario, puesto que "no tendríamos ninguna capacidad de poner tantos tachos de basura y luego poder sacarlos. No lo podemos hacer porque el tráfico está cortado y no hay ninguna posiblidad de hacer esto.

El gobernador agregó que "la única solución que queda es el dispositivo de limpieza que, actualmente, se hace  después de la fiesta", sostuvo.