La primera sala del Tribunal de Disciplina de la ANFP ya zanjó uno de los dos casos de racismo que afectaron al fútbol nacional. Ayer se hizo oficial el fallo de lo sucedido el 7 de noviembre pasado, cuando un grupo de hinchas de O'Higgins insultaron al venezolano Emilio Rentería en el pleito que sostenían los celestes y San Marcos de Arica en Rancagua.
El organismo determinó castigar al elenco de la Sexta Región con "un partido oficial, en que le corresponda actuar en calidad de local, a 'puertas cerradas'", según indicaba el fallo.
Sin embargo, había un problema. El texto detallaba que debía cumplirse "en el primer partido del Torneo de Primera División, que con posterioridad a la notificación de este fallo le corresponda al club O'Higgins S.A.D.P. intervenir en calidad de local". Los rancagüinos juegan hoy ante Audax Italiano. Según el informe, debían hacerlo sin público, aunque una parte de las entradas estaban vendidas.
Las autoridades del club hicieron llegar una carta al tribunal, alegando una mala redacción en el fallo, que debía especificar que el castigo se cumple tras estar completamente ejecutoriado. Es decir, tras la notificación del tribunal, tocan cinco días hábiles para presentar la apelación. Luego, el fallo debe ser ratificado (o revocado) por la Segunda Sala del Tribunal. Recién ahí se puede aplicar.
Los directivos celestes subrayaron el error, que fue recogido por el tribunal, donde se decidió arreglar la omisión. "Hubo un error de dos palabras en la transcripción y lo que corresponde es que el fallo debe cumplirse desde el momento en que queda ejecutoriado. Pero el fallo no ha sido modificado", aseguró el presidente de la Primera Sala, Exequiel Segall. De esta forma, el cotejo de hoy se jugará en condiciones normales.
De todas maneras, en O'Higgins lamentaron la sanción. "Qué lástima que por culpa de unos idiotas se castigue a un club, toda su hinchada y al estadio. Desde ese punto de vista encuentro injusto el castigo", apuntó el presidente Ricardo Abumohor, quien agregó que "entregamos al tribunal todos los antecedentes, incluso nombres de personas identificadas como las que agredieron a Rentería. Esos nombres los proporcionaron los mismos hinchas que estuvieron ahí, con la intención del proteger al club".
Por su parte, Rentería no emitió juicios sobre el castigo. "No puedo hacer nada si a O'Higgins le llegó un partido de suspensión. Me parece bien si sí o si no. No es mi trabajo ver si la sanción fue buena o no. Yo sólo me dedico a jugar", dijo el delantero. "Igualmente esto es lamentable, ya que quienes gritaron fue un grupito de gente que trapeó con el nombre de Chile", agregó.
Asimismo, Rentería se mostró resignado con la posibilidad de que llegasen a sancionar a quienes le gritaron insultos racistas. "A esas personas las puedes suspender por un tiempo, pero eso no va a cambiar la mentalidad que tienen. Sacarse el racismo de adentro es imposible", dijo.
En tanto, en relación al segundo caso de racismo, sucedido en el clásico entre ariqueños e Iquique en el Carlos Dittborn, Segall afirmó que se está analizando una forma de castigar, considerando que los hechos se generaron con la barra visitante. "Iquique está citado para la próxima semana. ¿Sobre el procedimiento? Nosotros lo tenemos clarísimo", explicó.
