Nicolás Castillo estaba ilusionado con arrancar jugando el Mundial, sabiendo que el próximo semestre seguiría su carrera en Italia. El Udinese era el club que en las últimas horas estaba cerca de llevárselo con una millonaria fórmula que buscaba convencer a Universidad Católica.
Sin embargo, las cifras no complacieron a los cruzados, por lo que el traspaso quedó en nada. "Se cayó la venta de Nicolás (Castillo), pues lo que pide Católica está fuera de mercado. Estábamos trabajando juntos para lograr la venta, pero no pudo ser. El deseo del jugador y nuestro es que siga creciendo, que fuera a Europa, y por eso se habló con el club para concretar su venta antes del Mundial, pero se cayó su traspaso a Italia. Católica pide cifras inalcanzables, las que apuesta conseguir, hipotéticamente, después del Mundial, en una postura intransigente, que no les garantiza nada", dice Alejandro Santiesteban, agente del atacante, quien, además, asegura que - con sus socios de AIM- encontraron trabas excesivas de la UC. "Lo que pedía Católica era exageradísimo, con una postura radical", prosigue el agente, abordando los US$ 8 millones que solicitan en San Carlos.
Además de Udinese, Napoli y Cagliari acercaron cifras que iban entre los US$ 4,4 millones a los US$ 5,5 millones. "Las ofertas que se entregaron eran importantes, pero las rechazaron todas para apostar a que después del Mundial va a llegar la cifra (US$ 8 millones), pero en Turquía puede darse que Chile pierda temprano y ahí Católica y el jugador perderán todo, lamentando esta decisión. Nos estrellamos contra un muro que no quiso dejar salir ahora a Castillo", agregó Santiesteban.
Este revés llevaron a no insistir con la UC: "Tomaron una postura intransigente que nos inquieta. Por lo mismo no insistiremos más y dejaremos tranquilo a Nicolás para que se enfoque, porque todo esto puede generarle más ansiedad de la necesaria y necesita tranquilidad. Ojalá que esta decisión no les pase la cuenta", finalizó el representante del delantero.