Un ex mayor del Ejército argentino juzgado por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura (1976-1983) desveló durante una audiencia el lugar donde se halla una fosa en la que se enterró a 25 desaparecidos en la provincia de Córdoba (centro), informaron hoy medios locales.
El represor Ernesto "el Nabo" Barreiro rompió su silencio dentro del megajuicio denominado "La Perla-Campo de la Ribera", que investiga las violaciones de los derechos humanos cometidos en dos de los principales centros de detención clandestinos de la región cordobesa, según difundió hoy el diario Página 12.
En la audiencia, Barreiro pidió al Tribunal Federal N°1 que no hubiera público ni periodistas y confesó que sabe de tres posibles lugares de enterramientos clandestinos, donde se podrían localizar los restos de 25 de las 400 personas cuyas desapariciones se investigan en la causa.
Según detalló el fiscal Facundo Trotta a Página 12, "Barreiro dijo que hay 20 (desaparecidos) en el horno de La Ochoa -en el centro La Perla-; cuatro más en un horno cercano a La Ochoa, y una víctima más, 'de nombre importante', enterrada cerca de Villa Ciudad de América (al sur de la ciudad de Córdoba)".
El tribunal convocó a miembros del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) y solicitó una inspección ocular sobre los detalles aportados por Barreiro.
Según fuentes consultadas por el portal oficial de información judicial Infojus, los lugares que señaló Barreiro coincidirían con los últimos hallazgos de restos óseos localizados por el EAAF a fines de octubre en La Perla y, aunque todavía no hubo precisiones sobre su identidad, se cree que podrían pertenecer a detenidos desaparecidos.
"En anteriores declaraciones, Barreiro asumió que los militares torturaron, pero se desligó de los fusilamientos y de los enterramientos, por lo que sería la primera vez que confiesa sobre el destino de los cuerpos y sobre la fase final del exterminio en La Perla", difundieron las fuentes consultadas por Infojus.
A la salida de la audiencia, el presidente del tribunal, Jaime Díaz Gavier, valoró como "altamente significativo" el "cambio de actitud" del ex mayor, ya que "es la primera vez en que, en los juicios (por los crímenes de la dictadura) de este país, los imputados han expresado su voluntad de colaborar".
Tanto Díaz Gavier como Trotta resaltaron que Barreiro repitió que rompió su silencio "en términos de una voluntad animada por un espíritu de caridad y tratar de paliar el dolor de los familiares".
Sin embargo, la Fiscalía y las asociaciones de derechos humanos no descartan que se trate de una maniobra para pedir algo a cambio, como una rebaja en las penas por colaborar con el tribunal.
La megacausa "La Perla-Campo de la Ribera", que comenzó en 2012, es el proceso judicial más grande por delitos de lesa humanidad fuera del área de Buenos Aires y comprende 25 causas, 716 víctimas y 54 imputados.
Según informaron medios locales, Barreiro está imputado por 518 delitos: 228 privaciones ilegitimas de la libertad agravadas, 211 imposiciones de tormentos agravadas, 65 homicidios calificados, 13 imposiciones de tormentos seguidos de muerte y la sustracción de un menor de 10 años.