Gran preocupación existe entre los trabajadores de la empresa minera Cerro Bayo. Por una parte, dos de sus compañeros permanecen atrapados en el yacimiento Delia II y se ha planteado la posibilidad de que la búsqueda sea suspendida, y por otra, su futuro laboral es absolutamente incierto.
La compañía les habría indicado que los recursos se estarían agotando y que se están quedando sin posibilidades de sostener las labores para encontrar a Jorge Sánchez (26) y Enrique Ojeda (34). Así lo comentó a La Tercera el secretario del sindicato de trabajadores de la Minera Cerro Bayo, Ariel Keim.
"Ayer por la tarde tuvimos una reunión y no fue mucho lo que informó la empresa, ellos informaban que la empresa está quedando sin recursos. Dieron a entender que dentro de los próximos días la búsqueda se podría suspender porque no tienen recursos para mantenerlas", sostuvo.
En ese escenario y como el gobierno tomó la determinación de decretar Estado de Excepción, los trabajadores creen que ellos tienen que asumir todo lo que sea necesario para que el rescate no se detenga. "El Estado es el que se tiene que hacer cargo, pero nos reunimos y sólo son buenas palabras, bonito discurso, pero no se ve mayor gestión. Se nos ha dado a entender que la continuidad de las labores está siendo evaluada, pero nosotros seguimos apelando a que se haga todo lo necesario", evidenció Keim.
"No se le ha tomado la seriedad ni el peso a la situación. Una vez que se encuentra agua, la intensidad de la búsqueda baja y hoy vemos que incluso se habla de retirar y suspender la búsqueda aun cuando nosotros pedimos que esta continúe hasta las últimas instancias", agregó.
En cuanto a esas labores, el secretario dijo que están completamente seguros de que en esta emergencia no se ha implementado todo lo necesario por los costos que conllevan y que incluso se han rechazado ofrecimientos que han llegado. Según ellos, además, la empresa ha costeado todo y el Estado sólo ha proporcionado la ayuda técnica.
"Queremos que esto se haga con hechos concretos, no sólo en el papel, que se traiga la tecnología que necesitamos, las herramientas y la maquinaria que sabemos incluso dónde está. Acá hay una discusión entre el Estado y la empresa por quien paga, pero pedimos que acá que el Estado asuma y después se arregle con la empresa", expresó el trabajador.
Si bien hoy están centrados en encontrar a sus compañeros, no desconocen que el futuro para ellos se ve un tanto complejo.
"Estamos muy preocupados. Más allá de la emergencia, el escenario es incierto, nosotros estamos iniciando el proceso de negociación colectiva la próxima semana y ahora con esto no sabemos lo que pueda pasar, porque antes de ese proceso no sabemos si nos podrían despedir. Estamos consultando con nuestros abogados", sinceró.
Keim contó que con los dineros que la compañía ha invertido en los trabajos, los despidos serían un claro mecanismo que podrían evaluar, pues como ya les habrían comunicado, la plata se estaría agotando.
Al conocer aquello, desde el sindicado dicen haber solicitado un informe que detalle punto por punto qué es lo que se ha hecho para rescatar a Jorge y Enrique, cuánto ha costado cada tarea y quién la ha costeado, para así analizar con mayores antecedentes cómo han sido las gestiones y cuánto han invertido.
La Tercera intentó comunicarse con la empresa para obtener información respecto de las inquietudes de sus trabajadores, pero lamentablemente los teléfonos no fueron atendidos.
Sensación de impotencia
La comunidad de Chile Chico ha seguido atenta esta emergencia, han mantenido su apoyo hacia los trabajadores y también su intranquilidad. No tienen la información clara de los que está sucediendo y también claman por poder rescatar a los funcionarios.
Ya han materializado manifestaciones, pero la tarde de ayer decidieron tomar cartas más estrictas, se coordinó junto al sindicato de trabajadores llamar a una gran marcha nacional que vaya en apoyo de los mineros y que exija a la autoridades continuar desempeñándose en el yacimiento, pues como comentó Keim, la mina no es una copa que se llene completamente, habiendo posibilidades, aún, de que sus amigos estén con vida.
La movilización se realizará el domingo 25 de junio a las 15.00 horas.