Chile es el país que envejece más rápido en América Latina, según la ONU. Tanto, que en 2025 los mayores de 60 años superarán a los menores de 15 años. El mismo año habrá 35 mil chilenos mayores de 100 años. Además del desafío que ello acarrea para las políticas públicas, se trata de un nicho de negocios sobre el que los fondos de inversión están poniendo sus fichas.
Esta semana se conoció que el fondo de renta inmobiliaria de Toesca Asset Management compró el 28% de la sociedad inmobiliaria Inmosa, que se dedica a la compra de terrenos y desarrollo de residencias de larga estadía para adultos mayores, con la opción de alcanzar el 40% de la propiedad a medida que se sumen nuevos proyectos. Hoy, dentro de sus terrenos arrendados tiene a las residencias Acalis.
A ellos se suman Cimenta, que también, como parte de su fondo inmobiliario de renta, controla los Senior Suites, que desde 1996 hasta hoy ha levantado 3 residencias en San Damián, Sebastián Elcano y Providencia, y que se prepara para una cuarta ubicación en Ñuñoa. Y aunque se trata de modelos de negocios distintos -Toesca ingresó a la sociedad inmobiliaria y Cimenta desarrolla y opera los centros- no se trata de cualquier tipo de residencias para personas mayores. Son edificios que albergan departamentos de unos 50 m2 y que constan de un dormitorio, una sala de estar y un baño acondicionado. Al mes, por ocupante, se puede pagar entre 40 y 90 UF (entre $ 1 millón y $ 2,3 millones), variando según el grado de dependencia. A eso se le suman servicios como enfermería, kinesiología, peluquería y un restaurante.
Sabiendo que en Chile el 16% de los mayores de 60 años pertenece al quintil más rico de ingresos, según la Casen 2015, el negocio es rentable y de alto potencial.
Según Fernando Rodríguez, gerente general de Cimenta, anualmente esta área de negocios aporta un 6% de rentabilidad sobre activos para el fondo inmobiliario. "Es un negocio complejo, porque nosotros lo operamos y eso tiene un alto costo. A pesar de ello, los ingresos de los adultos mayores van al alza y la tasa de envejecimiento crece".
Por su parte, Augusto Rodríguez, de Toesca, dice que "en Chile esta industria aún está en verde, pero es un negocio en expansión. Ahí vimos la oportunidad y decidimos invertir". De hecho, esta es la primera inversión que concreta el fondo: el resto se hará, además, en renta de oficinas, centros comerciales y bodegas, entre otros.
Además, cambios normativos han contribuido a desarrollar este tipo de negocios. Hasta 2010, en Chile no se podían construir edificios para una población inferior a las 400 personas por hectárea, lo que actualmente se permite y las residencias de adulto mayor se consideran, para efectos de legislaciones de construcción, como una gran casa con muchas habitaciones. En el mundo es un negocio creciente. En EE.UU., por ejemplo, hay fondos como el Health Care Teit, que cotiza en bolsa, y maneja 593 propiedades, con 58.263 habitaciones e inversiones por US$ 19.500 millones.