Hasta 20 toneladas de desechos dejados por el tsunami de Japón y que flotan en aguas del Océano Pacífico podrían llegar a las costas de Hawai para inicios del 2013, antes de alcanzar la costa occidental de Estados Unidos, de acuerdo con cálculos de científicos de la Universidad de Hawai.
Un buque ruso de entrenamiento detectó el montón de basura "incluyendo un refrigerador, un televisor y otros equipos electrodomésticos" en un área del Pacífico en la que los científicos de la universidad había predicho que estaría.
La mayor prueba de que se trata de restos del tsunami es un bote pesquero de la prefectura de Fukushima, el área más afectada por el desastre del 11 de marzo. Jan Hafner, programador científico, le dijo a The Associated Press el martes que las proyecciones de los estudiosos muestran que los restos llegarán a las costas de Oregon, Washington, Alaska y Canadá alrededor del 2014.
Los expertos estiman que los desperdicios están diseminado en un área de 3.200 kilómetros de largo y 1.600 kilómetros de ancho entre Japón y el atolón de Midway, donde los fragmentos podrían llegar en enero. "Existe ea idea equivocada de que es como una alfombra en la que uno puede caminar ", dijo.
Hafner y el principal científico en el proyecto, el oceanógrafo Nikolai Maximenko, han estado estudiando las corrientes oceánicas superficiales desde el 2009. Cuando ocurrieron el terremoto y el tsunami en Japón, ellos aplicaron sus estudios a los restos arrastrados por las olas al Pacífico. Emplearon modelos de computadora para rastrear su ruta, pero hasta que el barco ruso STS Pallada se puso en contacto con ellos el mes pasado, no tenían observaciones directas del enorme cúmulo de desperdicios.
"Desde el punto de vista científico, fue una confirmación de que nuestro estudio marchaba acertadamente", dijo Hafner. "Fue una buena noticia para nosotros. Pero tenemos sentimientos encontrados, porque uno no puede sentirse entusiasmado acerca de algo tan trágico como un tsunami".