Los ministros europeos de energía abordarán mañana el impacto de las revueltas del mundo árabe, en especial de Libia, en el precio del petróleo y el suministro de gas a la UE.
El barril de Brent, de referencia en Europa, llegó a pagarse el viernes US$112,14, un 9,3 % más caro que la semana anterior, un aumento que "de mantenerse varios meses tendrá un impacto muy negativo en la UE", dijeron fuentes de la Comisión Europea.
Los Veintisiete importan el 60 % del petróleo que consumen y de ese total el 40 % procede de los países de la OPEP, aunque sólo una pequeña cantidad de Libia.
Sin embargo, la inestabilidad que vive el país, que es el mayor productor de petróleo de África, con una producción estimada de 1,7 millones de barriles de crudo, el 2% de la producción mundial, ha bastado para inquietar a los mercados.
"La situación en estos momentos no es especialmente preocupante, pero debe hacerse un análisis a medio y largo plazo", opinó una fuente diplomática.
La Agencia Internacional de la Energía (AIE) calculó esta semana que el descenso en el bombeo de petróleo de Libia restó al mercado entre 500.000 y 750.000 barriles diarios, mientras que la petrolera italiana Eni habló de 1,2 millones de barriles, un 75% menos de la producción estimada.
Países como España han optado por poner en marcha medidas de ahorro energético para minimizar el impacto del encarecimiento del petróleo, como la rebaja a 110 kilómetros por hora la velocidad máxima en las autopistas y la reducción en un 5% de las tarifas en los trenes de cercanías y media distancia.
Los veintisiete abordarán la cuestión durante el almuerzo, después de que la Presidencia húngara de turno de la UE lo incluyese este viernes en la agenda del encuentro a petición de varias delegaciones nacionales.
Fuentes comunitarias explicaron que la falta de suministro de petróleo de Libia afecta a varios países comunitarios (España, Irlanda, Italia, Austria, Grecia, Portugal, Alemania, Reino Unido y Holanda), mientras que la de gas sólo a dos (España e Italia), pero que la de crudo es más fácil de solucionar.
La ausencia de gas libio puede resultar más difícil de suplir que la de crudo debido a que su transporte hasta la UE se realiza principalmente a través de gasoductos, mientras que el petróleo puede llegar en camiones, por lo que sólo se necesita otro vendedor.
La UE ha mantenido esta semana contactos informales con los países de la OPEP, que ya se han mostrado dispuestos a aumentar su producción, según fuentes comunitarias.
La reunión de mañana es la primera de carácter formal que celebra la UE desde el pasado viernes, cuando los Veintisiete se mostraron a favor de imponer sanciones inmediatas contra el régimen de Muamar el Gadafi.
Fuentes diplomáticas dijeron que se podría aprovechar el encuentro para tomar una decisión oficial, pero explicaron que quizá sea necesario convocar primero a los embajadores de la UE, lo que podría retrasar la respuesta europea varios días más.