Comienza el segundo día de audiencias en el Senado de Estados Unidos para confirmar los nombres del polémico gabinete del presidente electo, Donald Trump.
Uno de ellos y que está siendo interrogado por la Comisión de Asuntos Exteriores es Rex Tilleron, ex jefe de la petrolera ExxonMobil y nombrado por Trump para ser el secretario de Estado.
La nominación de Tillerson ha generado controversia por su cercana relación a Rusia, con quien ha hecho negocios mientras dirigía la gigante petrolera y muchas veces de forma contraria a los intereses de Estados Unidos.
Es por esto que los senadores, tanto republicanos como demócratas, le han hecho preguntas para despejar dudas sobre los posibles conflictos de interés entre él y el gobierno ruso.
A pesar de su cercana relación, el nominado a dirigir el Departamento de Estado, aseguró que "mientras Rusia busca respeto y relevancia en la escena mundial, sus recientes actividades no han respetado los intereses de los estadounidenses".
También admitió que los aliados de la OTAN tienen razón en alarmarse sobre la fortalecida Rusia, reconociendo que dicho país "ha invadido Ucrania, incluida la anexión de Crimea y apoyado a fuerzas sirias que violan brutalmente las leyes de la guerra", por lo que "nuestros aliados en la OTAN tienen razón al alarmarse sobre la fortalecida Rusia".
Además aseguró que el "islam radical posee un grave riesgo para los estados y ciudadanos. Derrotar ISIS debe ser una de nuestras prioridades en el Medio Este".