Un homenaje que permanerecá en el tiempo fue el que recibió Juan Román Riquelme, ya que en el Museo de la Pasión Boquense quedó inmortalizado en una estatua.

Uno de los máximos ídolos de la historia del club recibió emocionado el gesto y agradeció por tanto cariño.

"Nunca me imaginé algo así. Esto es demasiado para mí. No lo voy a poder olvidar nunca, mi familia tampoco. Vamos a estar eternamente agradecidos", señaló.

Riquelme recordó que "siempre fui hincha de Boca. Soy 'bostero' desde que nací, como mi viejo, y así me voy a morir. Para mí esto lo es todo".

"Ahora voy a estar por siempre en el club", manifestó emocionado, asegurando, además, que "para mí ponerme la camiseta de Boca es igual de importante que la de la Selección".