Fue en diciembre cuando la directiva de RN, presidida por el diputado Cristián Monckeberg, le encomendó al senador Alberto Espina elaborar un programa de gobierno.
Tras cuatro meses de trabajo, este viernes el senador dio por finalizado el programa, titulado "Reconstruyamos un mejor país", que sintetizó las cerca de 200 propuestas que surgieron de 33 comisiones de trabajo integradas por profesionales ligados al partido.
"Nuestras propuestas son un aporte para recuperar el rumbo de un país pujante, que es capaz de crecer para mejorar la calidad de vida de todos los chilenos, defendiendo y respetando sus derechos y su dignidad", dice el programa.
El texto será presentado hoy lunes en la reunión de directiva del partido, y será lanzado este sábado, en el consejo general en el que la colectividad proclamará al ex Presidente Sebastián Piñera como su abanderado presidencial. Allí, la mesa le entregará al ex mandatario el programa de gobierno.
"RN no sólo va a apoyar candidatos, sino que también ideas. El objetivo principal de nuestro partido este año es volver a ser gobierno y para eso necesitamos propuestas y ejes que apunten a mejorar la calidad de vida de Chile", afirma Cristián Monckeberg.
Las medidas
Son un total de 33 ejes programáticos, en los que se organizan una serie de medidas en materia de seguridad, educación, salud, crecimiento económico y otras áreas de gestión.
"Recuperemos el rumbo hacia el desarrollo", es el título de uno de estos ejes, que, entre las propuestas, plantea corregir la reforma tributaria realizada por el actual gobierno. "Para lograr mayor crecimiento económico se debe corregir la reforma tributaria, bajando los impuestos a las personas y a las empresas, haciendo un sistema en su totalidad integrado, que contribuya a la generación de empleo, fomente la inversión y que favorezca especialmente a la pequeña y mediana empresa", dice el texto.
El acápite correspondiente a educación se titula "Buenos patines para todos", y entre las propuestas se plantea realizar una reforma educacional "pro calidad", recuperar los liceos emblemáticos y aumentar la creación de colegios bicentenario de excelencia, así como otorgar beneficios a los estudiantes de educación superior "en base a su realidad económica y méritos, terminando con toda discriminación entre establecimientos públicos y privados".
Además, propone "mantener la educación escolar en los municipios que cumplan con estándares de calidad, para lo cual se debe aumentar la subvención escolar a rangos que permitan cubrir los costos de la educación pública".
En materia laboral, en tanto, se plantea una mayor flexibilidad laboral, que permita que los trabajadores puedan negociar los horarios, límite a jornadas laborales, sistema de turnos y bolsas de horas extraordinarias, así como establecer el derecho a salacuna universal, de modo de "incentivar el empleo femenino", además de "extender la cobertura y beneficios de los subsidios al empleo de mujeres y jóvenes a todas las trabajadoras vulnerables".
En el área de transportes, en tanto, la propuesta establece duplicar la red de Metro de Santiago y desarrollar un plan de trenes suburbanos, tranvías y teleféricos para cada una de las regiones del país.
En materia de seguridad, en tanto, el texto propone crear unidades especiales de investigación policial que permitan desarticular grupos, pandillas y organizaciones delictuales, así como "establecer políticas efectivas de rehabilitación de los presos en base a programas de trabajo".
El programa dedica un eje especial a la situación de violencia en La Araucanía, y plantea "concretar nuestra propuesta por la paz social, que significa definir las tierras que corresponden a las comunidades, enfrentar la pobreza rural, que se reconozca constitucionalmente a los pueblos originarios, fije cuotas de participación en el Congreso e indemnice a las víctimas de la violencia", así como aplicar la ley antiterrorista a los grupos u organizaciones que ejecutan actos de violencia.
Entre otras propuestas, y respecto de materias de regionalización, el texto plantea "traspasar reales competencias y recursos a las regiones, como requisito básico para la elección ciudadana de las máximas autoridades regionales", además de "establecer la subsidiariedad territorial, para lo cual se privilegiará la ejecución de las políticas públicas y programas sociales en las municipalidades".