"Hemos acordado agotar todos los medios para que se concuerde un procedimiento electoral más amplio que una convención, representativo y vinculante". Pasadas las 13 horas de ayer, el timonel de RN, Carlos Larraín, flanqueado por dirigentes de su partido y la UDI, leyó un comunicado en La Moneda, en que se cristalizaba un principio de acuerdo para la definición del abanderado único del oficialismo en una primaria "acotada" antes del 17 de agosto, fecha en que se inscriben las candidaturas.

La compleja búsqueda de un mecanismo para zanjar la carta de la Alianza monopolizó la cita en Palacio. Allí, el timonel UDI, Patricio Melero, emplazó a Larraín y le dijo que aceptaban la fórmula de una "gran convención" propuesta por los RN Alberto Espina y Nicolás Monckeberg.

La idea, se dijo, era que participaran parlamentarios, alcaldes, concejales, dirigentes y funcionarios de gobierno de ambos partidos. Larraín, dicen estas fuentes, rechazó la iniciativa, pues no quiere que La Moneda y sus funcionarios "intervengan" en el proceso.

Luego de una reunión a puertas cerradas de los representantes de RN, quienes le pidieron la oficina al ministro del Interior, Andrés Chadwick, se selló el acuerdo de la primaria. La declaración fue redactada por Alberto Cardemil y, antes de dar el visto bueno, la mesa se comunicó con Allamand desde La Moneda.

Aunque no se han entregado detalles, en el oficialismo explican que la primaria sería acotada a sólo una selección de militantes. Está por definirse si se incluye a ministros, subsecretarios, diputados, senadores, alcaldes, concejales, consejeros regionales y dirigentes de base o si se abre a todo el padrón de militantes.

Con este preacuerdo llegó luego la mesa directiva de RN a la casa de Allamand. Cercanos al ex senador dicen que, si bien visó la idea de explorar un mecanismo, no ha aceptado aún asumir una candidatura. Esto, porque no existe consenso respecto de quiénes participarían. Además, se zanjó que en caso de que el mecanismo se considere inviable, se retomará la idea de llegar con dos cartas a primera vuelta.

Luego de la cita en la residencia de Allamand, las mesas de la UDI y RN se reunieron en el ex Congreso. Tras casi dos horas, los timoneles reiteraron, básicamente, lo anunciado al mediodía e insistieron en que se "agotarán los esfuerzos" por una carta unitaria.

Las negociaciones entre RN y la UDI se retomarán el miércoles, luego de que hoy se discutan las fórmulas en instancias internas de cada tienda.

Fuentes de la Alianza dicen que uno de los nudos que existen es el nivel de convocatoria, pues RN quiere incluir a movimientos independientes, como Evópoli, que apoyó a Allamand. Este partido busca un universo de 20 mil potenciales votantes; la UDI, en cambio, cree que debe ser de cuatro mil.

Se evalúa también que voten representantes de los militantes en cada región del país. En esa línea, Larraín ya había planteado en el comité político que se utilizara un esquema similar al de EE.UU., con los denominados "grandes electores".

Con todo, en el oficialismo no se esconde que la negociación es compleja y que la posibilidad de que se deseche el mecanismo y el consejo general de RN levante un candidato está vigente. Ayer, al terminar la conferencia, hubo un contrapunto entre Melero y Larraín: mientras el primero descartó dos candidatos en primera vuelta, su par de RN dijo que se trata de un escenario "contemplado en la ley".