Por segunda vez desde que llegó a la liga rusa, el brasileño Roberto Carlos es víctima de racismo en el terreno de juego.

El ex seleccionado brasileño iba a realizar un lateral en el partido de su equipo Anzhi Makhachkala frente al Krylya Sovetov cuando desde las gradas le lanzaron una banana.

En modo de protesta, y como se jugaban los descuentos, el lateral abandonó la cancha antes del silbatazo final mostrando su molestia ante la situación.

La liga rusa decidió abrir un expediente disciplinario por lo sucedido y el club también inició su propia investigación.

Roberto Carlos también había sufrido una situación parecida a comienzos de año, cuando un hincha del Zenit le ofreció una banana, lo que finalmente derivó en una multa de US$ 10 mil para el campeón ruso.