Colo Colo intentó por todos los medios rescindir el contrato de Roberto Gutiérrez o bien mandarlo a préstamo para evitar pagar los $ 16 millones que percibe el jugador mensualmente como remuneración.

El "Pájaro", junto a su representante, Edison Pereira, siempre tuvieron como primera opción mantenerse en el "Cacique" y cumplir el vínculo establecido a mediados de 2011, oponiéndose a la idea de Blanco y Negro.

Aun así, la sociedad anónima siguió insistiendo en la salida del delantero. Es más, estuvo a punto de ser moneda de cambio en la negociación con Unión Española por Emiliano Vecchio y Emilio Hernández, oferta que no aceptó, pese a que conversó con el técnico rojo, José Luis Sierra, quien aprobó su posible llegada a Santa Laura.

El último intento de la concesionaria por deshacerse del atacante formado en Universidad Católica sucedió el viernes pasado, cuando el técnico Omar Labruna le comunicó, en plena pretemporada en Mantagua, que debía regresar a Santiago para conversar sobre su futuro con la dirigencia de Colo Colo, situación que molestó al ariete.

Aquel día decidió seguir en Pedrero y buscar una revancha, aunque la relación con la dirigencia de ByN se desgastó bastante, pues está con el manejo que han tenido y por la filtración de su sueldo.

Ayer, Gutiérrez confirmó en radio ADN su decisión de mantenerse en el conjunto popular. "De lo primero que se hablaba era de la plata que gano, que de mi parte no salió ni tampoco de mi representante. Para mí sería mejor que me dijeran 'Roberto, haz esto, o dejaste de hacer esto'. Al final, uno negocia de la manera que puede, pero no siento que haya una crítica constructiva de parte de la gente y eso me ha afectado", aseguró.

"Hay momentos en que uno como jugador se 'pone el balde" cuando no juega y al final se perjudica uno. El año pasado pensé que el cuerpo técnico tomaba decisiones equivocadas y por eso me 'ponía el tarro'. Este año, independientemente de las decisiones que tomen, no pasará eso. Me estrujaré al máximo para tener una oportunidad", agregó.

El "Pájaro" reconoció que su relación con los dirigentes está en un mal momento. "Con los dirigentes la relación no está muy buena, porque hablaron unas cosas y después hablaron otras. Mientras que con Omar siempre ha existido transparencia, porque desde el primer momento me dijo que si habían opciones las tomara, pero que si me quedaba iba a tener las mismas opciones", finalizó Gutiérrez, que va por su revancha.