Romero se cuelga un oro impensado

Nadie lo entendía. Incluso, pocos lo creían. Ayer, Claudio Romero, el campeón mundial sub 18 en el lanzamiento del disco, superó cualquier expectativa y, ahora, se adueñó del cetro panamericano sub 20, una categoría más alta que la suya.

El joven de 17 años llegó el miércoles a Chile recién coronado de Kenia y ni siquiera pudo estar un día en casa, pues sabía que debía viajar junto a la delegación chilena para representar al país en el Campeonato Panamericano Sub 20 de Trujillo, Perú. Lo hizo el mismo miércoles. Y allá volvió a todos locos, úes se impuso sin ningún miramiento en la prueba que lo está enalteciendo.

El atleta de la U. Católica se impuso con un intento de 62,09 metros, casi tres más que su marca personal, agigantando ahora el récord nacional de la categoría, que ya era de su propiedad.

Su entrenador, Eduardo Sotomayor, era uno de los incrédulos. Su ojo, especialista en lanzamientos en Chile, le falló esta vez. "La verdad es que era algo casi imposible de conseguir. Debía superar al jamaicano y al norteamericano, que venían con la primera y segunda mejor marca del mundo este año. Que él sea campeón panamericano era algo que nunca imaginamos", confiesa.

Dos vallas muy altas

Y claro, en el camino Romero dejó a dos bestias de la categoría. Turner Washington, el estadounidense que llegó con la segunda mejor marca mundial de 2017, de 64,62, se quedó con la plata gracias a un intento de 61,30 metros. Mientras que el jamaicano Roje Stona, con la mejor marca del año (66,41), quedó relegado al cuarto puesto, con un intento de 58,63. Kevin Nedrick, su compatriota, se colgó el bronce, con 58,86 metros.

Es difícil explicar el momento por el que pasa Romero. Su entrenador cree que el triunfo en Kenia lo hizo despegar: "Él compitió en el Sudamericano de Guyana y no le fue bien, salió tercero. Por eso es que ahora pienso que, con el oro en el Mundial, cambió su forma de ver esto, porque aprendió a competir".

Sotomayor confiesa que incluso le aconsejó no disputar el torneo "tan en serio". "Estuvimos dos noches viajando a Chile. Fue algo agotador. Por eso le dije que se dedicara a dormir bien, a descansar. Era muy difícil que hiciera lo que hizo, porque venía de competir hace menos de una semana, su musculatura ya estaba cansada, ¡pero lo hizo igual!", comenta emocionado.

El domingo, Claudio competirá en la bala. Es el penúltimo en el ranking. Pero con Romero nunca se sabe.