El precandidato republicano Mitt Romney puede dar hoy un importante paso para cerrar matemáticamente su nominación a la candidatura de su partido a la presidencia de EEUU en las primarias que se celebran en cinco estados del noreste del país.

Romney encara la cita con la firmeza de tener asegurados la gran mayoría de los 231 delegados que se repartirán entre los cinco estados que han convocado primarias: Pennsylvania, Nueva York, Connecticut, Delaware y Rhode Island.

Por ese motivo, ayer recalcó durante un discurso en Aston (Pennsylvania) las diferencias con su rival en noviembre, el Presidente Barack Obama, pero dejó sin aclarar a quién elegirá como candidato a la vicepresidencia.

Preguntado por los periodistas, Romney insistió en que la búsqueda de un compañero de carrera "aún está en su etapa más temprana".

Romney ha designado a su asesora Beth Myers como coordinadora del proceso de selección de candidatos a vicepresidente, y ella "ha empezado a compilar algunos de los nombres y los criterios que podrían asociarse con ese proceso", según explicó el aspirante. "Pero la verdad es que no hemos tenido aún ninguna conversación sobre hacer una lista o evaluar a varios candidatos en concreto", añadió Romney.

De los estados que votan el martes, Nueva York será el que repartirá más delegados, con un total de 95, seguido de Pennsylvania, con 72; Connecticut, con 28; Rhode Island con 19, y Delaware con 17.

Romney cuenta hasta ahora con 659 de los 1.144 delegados necesarios para asegurarse la nominación republicana, que se anunciará en la Convención Nacional de agosto en Tampa (Florida).